Capítulo 4: Él puede verlos.

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El martes por la mañana un par de chicos, que Josh no había visto antes en la escuela, lo detuvieron en el pasillo. Uno de ellos era bastante alto y tenía cabello castaño, un flequillo bastante largo que casi le cubría un ojo y el resto peinado con gel hacia un lado, ojos café y nariz redonda, el otro era un tanto más bajo y tenía el cabello completamente negro y lacio, ojos enormes y color café y labios gruesos.

-Hola. -Saludaron al unísono.

-Ah... Hola -Respondió Josh un poco confundido -¿los... conozco?

El más alto negó con la cabeza antes de que el otro los presentara -Soy Brendon, él es Ryan.

-Oh, un placer, soy Josh -se presentó a si mismo extendiendo el brazo, sin embargo ninguno de ellos respondió al saludo.

-Lo sabemos -volvieron a hablar al unísono y Josh metió su mano en el bolsillo sintiéndose algo avergonzado.

-También oímos que tocas la batería. ¿Es cierto? -continuaban hablando al mismo tiempo y a Josh comenzaba a dolerle la cabeza, aún así asintió.

-Sabes, nosotros estábamos pensando en formar una banda y queríamos saber si no querrías ser nuestro baterista -Esta vez fue Brendon quien habló, Ryan se había acercado a él por detrás y ahora lo sujetaba por los hombros, era más que extraño y Brendon tan sólo sonreía, pero su sonrisa por algún motivo era escalofriante. Joder.

-¿Qué te parece? -Preguntó Brendon, ampliando su sonrisa.

Josh tragó saliva -um... está bien -respondió finalmente.

Ryan dejó de hacer presión sobre sus hombros y la expresión de Brendon dejó de verse tan amenazadora -¡Genial! -volvieron a exclamar al unísono, no dejaban de parecer aterradores, eran realmente extraños.

-¿Puedes venir a casa por la tarde para audicionar? -propuso Ryan.

-amm... eso creo -trató de sonreír, y entonces ellos se voltearon, se alejaron unos cuantos pasos y Ryan volteó para decir: -te esperamos. -Y un horrible escalofrío lo recorrió.

-oh mierda. -Y entonces se dio cuenta de que jamás le había dicho su dirección, pero cuando se volvió ya no había nadie en el pasillo, y el ambiente se sentía pesado y denso. Supuso que volvería a cruzarse con ellos y le se los preguntaría entonces. En ese momento lo único que quería hacer era volver a su casillero y buscar sus cosas para poder regresar a su salón y alejarse de ese lugar que ahora le provocaba escalofríos.

Pero le acababan de ofrecer entrar en una banda, ¿Qué era lo que le preocupaba tanto?

Cuando entró al aula Tyler ya se encontraba ahí, solo y con la cabeza metida en su cuaderno, donde escribía a toda velocidad.

Josh se sentó junto a él y al ver que no alzaba la vista de las hojas tocó suavemente su hombro, Tyler se sobresaltó un poco pero dejó de escribir inmediatamente y se volteó a verlo -Ho-Hola Josh... -murmuró sin verlo directamente.

La sonrisa de Josh no podía ser más grande, ahora que comenzaba a relajarse entendía lo que acababan de proponerle, iba a estar en una banda, iba a volver a practicar, iba a volver a tocar -¡Me ofrecieron tocar en una banda! -Exclamó, la emoción era evidente en su voz.

-¿En serio? -Preguntó Tyler, repentinamente interesado -Eso es genial. -Lo felicitó dedicándole una pequeña pero sincera sonrisa.

-¡Lo sé!

-¿Con quién vas a tocar?

-Un par de chicos que no había visto antes, quizás los conozcas, se llaman Brendon y Ryan.

Como Patrick rescató al raro chico nuevo de su propia casa.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora