No faltaba mucho para que el prometido y omega destinado del alfa Kim Namjoon diera a luz. El doctor había dicho que, entre dos o tres semanas, el pequeño cachorro estaría con ellos.
Jin se había reunido con los dos revoltosos alfas que tanto quería, claro, con sus escoltas muy bien camuflados.
La cafetería estaba básicamente solo para ellos tres. En el resto de las mesas estaban los supuestos clientes, lo cuales se notaba a kilómetros que eran los hombres de Namjoon.
—Fue mi idea. —El par de alfas ya había comenzado a discutir de quien había sido el responsable de que SeokJin volviera a encontrar a su destinado.
—No, fue mi idea. —Jimin lo miro sobre su hombro, viendo como Taehyung sonreía repentinamente.
—Oh si, fuiste tú. Cuando te provoque ese gran orgasm... —Jimin no tardo en tapar su boca, viendo como Taehyung reía en alto.
—No creo que tengas que dar detalles, amor.
Siendo liberado, Taehyung suspiro. —Detalles, bonitos detalles. —El alfa dejó un beso sobre la mejilla de Jimin.
—Diría que es extraño verlos juntos, pero sería mentira. Desde que son niños los he querido ver como pareja. —Ambos alfas rieron, aunque dejaron de hacerlo cuando Jin hizo una mueca.
—Hyung, ¿te sientes bien?
El mayor asintió. —Sí, solo es una contracción, el doctor dijo que podrían estar dándome. —El omega trato de tomar el batido que había pedido, pero otro fuerte dolor en su vientre llegó, dejando caer el vaso. —Ay, no, no...por favor.
—¡Jinnie! —Aquel gritó de Jimin por la preocupación hizo que algunos de los hombres se acercaran.
—Señor, si se siente mal podemos llevarlo al hospital. —Han, el beta que se había convertido en el guardaespaldas de Jin, tomo su mano para que no cayera, sintiendo como el omega la apretaba con tanta fuerza que la veía cambiar de color.
—Lla-llama a Namjoon, dile que... ¡agh, maldición!
El vientre de Jin era grande, por lo delgado que era a pesar de comer mucho, cualquiera hubiera pensado que su pancita no sería tan grande. Pero aquel cachorro habría crecido tanto que parecían ser dos en vez de uno los bebes que llevaba el omega.
Jin pudo respirar un poco, aunque ahora sus pies estaban totalmente mojados. Había roto fuente.
—¡Ay, carajo! —Gritaron a la vez ambos alfas.
Taehyung, Jimin, Han y los demás hombres se quedaron estáticos. Mirando el suelo mojado.
—¡No se queden ahí parados como idiotas y llévenme a un maldito hospital o les corto la cabeza a todos! —Ese fue el momento en que todos reaccionaron.
Todos los hombres salieron, rodeando al omega mientras subía al auto con ayuda de la pareja de alfas.
En el trayecto, el teléfono de Jin comenzó a sonar, viendo que era su alfa. —¡Joonie!
—Mi amor, siento tu dolor. ¿Te paso algo? ¿Él bebe está bien? —La voz preocupada del alfa hizo sonreír a Jin. Se había enamorado tanto ese tonto mafioso.
—Alfa, rompí fuente.
—¿Qué? —El omega escucho como empezó a balbucear. —¡Faltaban dos semanas! Bueno, eso no importa. Voy para allá, cariño.
—Alfa... —Repentinamente la voz de Jin se quebró. A su lado, Taehyung y Jimin tomaban su mano, acariciándolo para que se relajara, mientras el auto y los demás trataban de abrir paso para llegar al hospital. —Joonie, tengo miedo...
—¿Qué dices, mi amor? No debes temer nunca, eres el omega más fuerte que conozco. —Namjoon escucho como su omega gimoteaba. Era su primer cachorro, comprendía que podría estar asustado, también lo estaba, pero debía mantenerse para él. —Cuando te vi, supe que serias todo para mí, eres un omega capaz de todo. Juntos vamos a recibir a nuestro cachorro.
—Ven a mí, alfa.
Namjoon apretada sus manos, odiaba escucharlo de esa forma, aunque no era culpa de nadie, ambos estaban en sus propios asuntos y la llegada repentina fue sorpresa para todos.
Alfa y omega habían tenido demasiadas aventuras durante todo el embarazado. Namjoon lo había visto en todas sus facetas, eso simplemente lo había hecho enamorarse más de lo que ya estaba.
Jin había llegado a llorar varias veces, pero siempre era por comida.
—Estoy muy cerca de ti, omega.
Por el GPS, Namjoon supo que Jin ya había llegado al hospital, no habían cortado la llamada, pero lograba escuchar las quejas de Jin por el dolor. A su lado, Yoongi maneja tan rápido como jamás lo había hecho en su vida.
Estando en una silla de ruedas, Jin era llevado por un largo pasillo hacia la sala de parto. —¡No, no! Mi alfa aun no llega.
A dos calles del hospital, un alfa de cabello rosa corría con todas sus fuerzas entre los autos. Las vías estaban totalmente bloqueadas por el tránsito, su mejor opción era correr para poder llegar a su omega.
Llegando a las puertas, pudo ver a varios de sus hombres, quienes cuidaban la entrada, indicándole donde estaría el Jin. Con solo doblar el pasillo escucho los dulce gritos de su amado. Jin peleaba con dos enfermeras, las cuales le decían que debían entrar a la sala, mientras el omega les gritaba que no iría a ningún lado hasta que su alfa llegara.
—¡Omega! —Los ojos de Jin brillaron al ver a su alfa, estirando sus brazos lo abrazo cuando este se inclinó, besando sus labios.
—¡Alfa! —Chillo de alegría. Su rostro rojo por sus lágrimas y enojo lo hacían ver como una hermosa fresa para los ojos de Namjoon.
—Deja de pelear y entremos.
Estando ya dentro, el doctor y las dos enfermeras comenzaron a preparar todo, mientras la pareja hacia ejercicios de respiración.
Aunque estuviera concentrado solo en Namjoon, pudo notar como una de las enfermeras miraba cada cierto tiempo a su alfa.
—Ya sé que mi alfa es muy sexy y guapo, pero deja de mirarlo o te arranco los ojos. —Jin miró con furia a la chica, quien, bajo su mirada, siendo regañada por el médico. El omega estaba siendo más que el mismo en esos momentos, decir que su animal estaba tomando el control era poco.
—Muy bien, es hora Jin. Necesito que empujes con toda tu fuerza, ya está en posición, solo debes pujar. —El omega asintió, estando con sus piernas en cada esquina, su rostro ya comenzaba a sudar.
Los gritos en aquella habitación hacían que todos los que estaban en la sala de espera sufrieran. El cachorro estaba listo para salir, el problema es que su cabecita estaba expandiendo la entrada de Jin más de lo esperado, haciendo que este se quejara en alto.
Un llanto, los gritos del bebe hicieron que el omega olvidara por completo el dolor que había estado sintiendo. Sus ojos buscaron al pequeño cachorro, quien fue envuelto en un manta.
Namjoon sostenía su mano, la cual tal vez no sentiría en varios días. Sonriendo en grande cuando aquel bebe estuvo en los brazos de su omega. Esos grande, brillante y hermosos ojos los miraron a ambos, sonriendo al ver la cara de sus padres.
—Oh Namjoon...nuestro cachorro es lo más lindo que he visto.
El alfa se sentó a su lado, rodeando con sus brazos al omega, quien cargaba al pequeño en sus brazos con tanta delicadeza. La pareja miraba con tanto amor a su pequeño.
—Nuestro pequeño, Kim Jungkookie.
.
.
.
.
💜TAM💜
ESTÁS LEYENDO
Subasta [Namjin] OMEGAVERSE
RomanceJin sabe que Namjoon es su alfa destinado. Pero no desea aceptarlo solo porque es un mafioso.