Caliente

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-¿Pero qué ha pasado? -Pregunta el rubio.

-Uno de los cuartos ha empezado a arder por una sustancia química. Suerte que hemos salido todos a tiempo. -Responde Pedri. -Además, Busquets y Alaba han conseguido apagarlo rápidamente.

Haaland mira el móvil.

-Vaya, tengo una llamada perdida. Voy a ver.

karla10

Llamada perdida

Hola, perdón por no coger la llamada, estaba ocupado. ✅

No te preocupes cariño, ya sé lo que ha pasado,

me lo ha dicho Thomas. ¿Estáis bien?

Sí, por suerte han logrado apagar el fuego. Ahora me iré a casa de vuelta.

Está bien, si quieres voy a buscarte. Me

ha dicho Marco que él se quedaría

más tiempo allí.

Si no te importa venir a recogerme, perfecto.

Todos entran de vuelta, excepto nuestro protagonista.

-¿Te vas ya? Venga, hombre, que aún hay mucho que enseñarte. -Exclama Reus.

-Va a venir Karla a recogerme. Mañana vuelvo otra vez para que acabes de enseñarme esto. -El noruego se despide y espera en la calle. Un SUV negro y elegante llega hacia él.

-¡Vaya coche!

-¿A que sí? Vamos, sube. -Exclama la rubia.

El largo camino de vuelta a casa de Erling apenas acaba de empezar.

-Hey, ¿qué hora es? Desde que he salido con el coche he perdido la cuenta del tiempo. -Pregunta ella.

-Son las seis menos cuarto. Aún es pronto.

-Uf, no creo que me de tiempo a llegar a mi casa antes de las ocho.

-Puedes quedarte a cenar y dormir hoy en la mía, si no te parece mal. -Haaland empieza a sonrojarse.

-Oh, no hace falta, no quiero molestar. -Responde Karla tímidamente.

-Venga, sabes que nunca eres una molestia. Además así podremos hacer más cosas juntos.

-Está bien, pero tendré que avisar a mi hermano de que no voy a estar en casa.

-¿Tienes un hermano? No lo sabía.

-Sí, mayor que yo por tres años. Este es él. -Karla le enseña una foto de su hermano a Haaland. -Cuando quieras te lo presento.

-La verdad es que es bastante guapo. Porque soy hetero y me gusta ella, que sino... -Piensa. -Parece bastante agradable. Seguro que es buen hermano.

-Bueno, cambiando de tema, ya casi llegamos.

-Aiba, ¿qué es esto? -Erling ve un restaurante enorme y luminoso en una calle llena de innovedades. -Karla, ¿dónde estamos?

-Estamos yendo a tu casa. Por aquí también se puede ir, me lo pone en el GPS. -Haaland se acerca para ver la ruta porque no se fía de su amiga, pero resulta tener razón.

-Oh, no sabía que podíamos llegar por aquí también... No esperaba que Manchester fuese tan moderno.

-Jajajaja, bueno, es una ciudad muy industrial. Se nota que acabas de llegar aquí.

-Sí, bueno...

-Ahora sí que ya estamos.

Ambos salen del coche ya aparcado y entran en la casa.

-Vaya, qué tarde se ha hecho. Ya son las ocho. Creo que tengo una pizza hecha, ¿la caliento y nos la comemos?

-Me parece bien, al fin y al cabo, eres tú el dueño de la casa.

Haaland mete la pizza en el horno.

-¿Puedo ver las noticias? Hace bastante que tiempo no las veo y no me entero de la actualidad.

-Claro, siéntete como en tu casa. Aunque yo creo que sería mejor si vemos Netflix.

Ambos se sientan en el sofá y encienden la tele.

-Por cierto, ¿tienes pijama? Si vas a dormir aquí necesitas uno, vas demasiado guapa como para dormir así.

-Sí, tengo uno en el coche. Iré a por él. -Mientras ella coge el pijama, Erling piensa bastantes cosas. -¿Le gusto? ¿Sí, verdad? ¿O no? Espera, ¿somos novios? ¿Qué me pasa? Debería calmarme.

Karla vuelve al salón con el pijama ya puesto.

-Ya está. Siempre duermo en chándal.

Haaland se queda asombrado al verla.

-Bueno, yo también voy a cambiarme, que luego sino me olvido. -Él se va a su cuarto y ella busca series para ver.

-A ver... Stranger Things ya la hemos visto los dos, Vis a Vis también, La Casa de Papel también... Habrá que buscar en lo más profundo.

-Ya estoy preparado.

-Genial, estaba buscando series para que veamos juntos.

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