Dragonball: El torneo continúa (What if)

52. El dilema de un saiyajin

"Un fenómeno visto sólo hace siete años..., desde entonces hemos creído que aquella vez todo fue por culpa de la histeria colectiva... ¡Ahora vuelve a repetirse de nuevo!, más peligroso que antes, entonces nos preguntamos ¿Realmente fueron trucos los que había utilizado ese monstruo de Cell o de verdad sus poderes estaban más allá de nuestro entendimiento?"

"¿Dónde esta Mr. Satán? ¡¿Por qué no ha dado la cara todavía?!"

"¿Qué espera nuestro campeón mundial para salvarnos?"

"Esto ha estado sucediendo desde que comenzó el torneo de artes marciales, ¡Fueron esos extraños peleadores usando trucos!"

"He oído que Mr. Satán fue derrotado en el torneo por un peleador desconocido... ¿Es eso cierto?"

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En el palacio de Kami-sama estaba Dende restableciendo la energía de Vegeta con ayuda del Supremo Kaio-sama hasta que se detuvieron por el reciente acontecimiento abajo en la superficie ¿Son Goku había derrotado a Majin Buu? ¿Lo había logrado? El Supremo Kaio-sama ciertamente no estaba convencido y buscaba desesperado con su vista divina algún pequeño indicio de que el monstruo se encontrase por ahí.

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No había nada, era como si hubiese desaparecido.

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-Eso no es cierto -dijo Vegeta incorporándose ya algo más recuperado- ¿Acaso no lo sienten?

El foráneo se concentró cerrando los ojos y efectivamente era el Ki de Majin Buu.

-¡Lo sabía! ¡Ese demonio es indestructible! -se lamentó.

Vegeta avanzó con calma hacia Kaio Shin y lo tomó de la ropa en forma de amenaza.

-¡Parece que hay cosas que no nos ha contado de esa bola de chicle! -reclamó el saiyajin- ¡¿A qué se refiere con que es indestructible?! ¡¿Acaso es inmortal?!

El Supremo agachó la cabeza.

-Desde el principio no ha parado de repetir que no debíamos subestimar a ese monstruo -continuó Vegeta-, ¡Pero ya vio el poder que tiene Kakarotto! ¡¿Aún así sigue dudando?! ¡¿Qué es lo que no nos está contando?! -lo soltó.

Había cometido un error al subestimar los poderes de los mortales. Aquellos guerreros con los que tuvo la fortuna de encontrarse poseían un poder más allá de lo imaginable ¿Cómo era posible? En milenios no había visto una raza tan poderosa y ni siquiera el tirano Freezer tenía comparación con ellos.

No esperaba que fuera posible derrotar a ese monstruo, en ese caso les habría contado desde hace mucho sobre sus debilidades y no tendrían que pasar por tantos problemas. Shin se había obsesionado tanto con evitar el despertar de Buu que no pensó en lo que deberían hacer si es que llegara a fracasar.

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-Majin Buu... tiene la capacidad de vivir eternamente -comenzó-, pero no es inmortal... es posible acabar con él, sin embargo, habría que destruir hasta la última partícula de su cuerpo para poder matarlo realmente.

-¡¿Qué?! -exclamó Vegeta- ¡¿Entonces... ese monstruo es igual a Cell?!

-¿Cell?

-Es un enemigo que derrotamos hace mucho tiempo, el desgraciado tenía la capacidad de regenerar todo su cuerpo siempre y cuando quedara su núcleo intacto.

-¿Núcleo? -negó con la cabeza-. Buu no tiene esa debilidad. Si queda solo un pedazo de él por muy pequeño que sea podría recuperarse por completo... Además eso no es lo peor que puede llegar a hacer...