Capítulo XI: El sombrerero.

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Admiro con grandes ojos la montaña al frente suyo, el verde y rojo predominaban, las flores amarillas y naranjas también se combinaban, miro a todos lados con una ceja levantada por lo que admiraba, no recordaba que Kokonoi nombrará una montaña, m...

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Admiro con grandes ojos la montaña al frente suyo, el verde y rojo predominaban, las flores amarillas y naranjas también se combinaban, miro a todos lados con una ceja levantada por lo que admiraba, no recordaba que Kokonoi nombrará una montaña, miro de reojo a Takemichi esperando que este hablara.

El chico no tardó en notar la mirada hacia su persona, miro inocente a Mikey tratando de adivinar que quería que le dijera, Manjiro solo suspiro.

A veces le sorprendía lo poco comprensivo que era Takemichi.

- ¿Tenemos que pasar la montaña?- Dijo con cansancio.

- Si queremos llegar al Reino de Fuego entonces si - Hablo sonrientemente.

Mikey volvió su vista a la montaña, si miraba un poco más de cerca se notaba como arriba del todo se encontraba una casa, de una forma extraña, desde su punto de vista era con forma a un sombrero, miro aún más confuso sin entender.

¿Quien viviría en una montaña?

Solo alguien que estaba completamente loco o que tenía escasez de amor en su vida, pensó, miro al vampiro haciendole una señal con la cabeza.

Empezó a caminar poco a poco seguido del vampiro en la parte de atrás, subieron la montaña algo rápido, no tenía tiempo para lidiar con una montaña en ese momento.

Subieron y subieron, Mikey podía divisar lo grande que era la casa desde la distancia en la que estaba, miro con más confusión si es que aquello se podía, noto como una luz estaba prendida dentro de está resaltando en la ventana.

Llegaron a la cima, la curiosidad ganó por parte de Mikey, este se acercó a la ventana de la que provenía aquella luz, puso sus manos tratando de enfocar lo que había dentro de esta.

Nada.

Solo era una pequeña sala en la que había muchas variantes de colores y tamaños de tela, máquinas de coser y botones por doquier.

¿Quien viviría en tal reguero?

Miro con decepción, a estas alturas esperaba algo extraño como todo lo que había visto en ese mundo hasta ahora, brujas, científicos, zorros, gatos, reyes y al parecer un vampiro loco por él.

Escucho una risa cerca de donde estaba, miro a todos lados notando a Takemichi volando tranquilamente en el aire aburrido, frunció el ceño al verlo tan relajado.

¿Cómo podía estar así?

- ¿Escuchaste eso?- Pregunto alerta, noto el asentimiento del vampiro el cual seguia igual de tranquilo.

Escucho nuevamente la risa, miro a todos lados sin ver a nadie nuevamente, le estaba empezando a estresar la situación, miro a Takemichi el cual estaba asiendo un puchero mientras bajaba lentamente tocando la tierra con sus zapatos, y apenas se familiarizó noto como caminaba a la puerta de la casa a paso algo rápido.

Caperucita roja y el Vampiro feroz  (Takemikey)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora