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No le había costado manejar hasta allá, es decir, ya lo había hecho antes, así que no era nada nuevo para él.

Una vez en la casa de la playa, ambos se bajaron del vehículo e ingresaron a esta, donde una sala de estar llena de globos negros, dorados y transparentes con confeti lo estaban esperando al cumpleañero.

Un pequeño gusto amargo se sentía en todo eso, no porque no le gustara a Jimin, sino porque así había sido como Nochu le había pedido de manera oficial en Las Vegas que fuera su novio.

- Solo te faltó el champagne - Atinó a decir.

Y el pelinegro rió por lo bajo, dirigiendo sus pasos hacia la cocina, y volviendo de esta con dos copas de champagne en una mano, y una pequeña tortita con una vela encendida en la otra mano.

- Feliz cumpleaños - Dijo alegremente pero en un tono un tanto bajo, como si fuera un momento super íntimo entre ambos - Acordate de pedir tu deseo.

Jimin sonrió, incluso podía jurar que tenía lágrimas amenazando con salir, pero aún así hizo un esfuerzo por contenerlas. Cerró sus ojos, e inhaló aire para finalmente exhalarlo, pidiendo su deseo.

- Gracias Koo.

Con sumo cuidado el pelinegro dejó la pequeña torta en la mesa de estar, y le entregó al más bajo una de las copas de champagne que cargaba.

- Siempre se brinda por un año más, ¿no?

- ¿Sos consciente que tenes medicamentos con los que no podes beber alcohol? - Claro, pequeño detalle.

- Es champagne sin alcohol - Pero ya lo tenía cubierto - Salud.

No podía con él, no era su Nochu del pasado, pero en realidad sí lo era, y eso hacía que cayera nuevamente como desde el minuto cero por él.

- ¿Suena mal si digo que esto era todo lo que quería? - Se animó a preguntar.

- ¿Una mini fiesta? - Preguntó el DJ haciéndose el desentendido.

- Pasar mi cumpleaños con vos.

Jungkook sonrió - Para mi no suena mal, incluso me tomé la libertad re adueñarme de vos en tu cumpleaños, así que menos mal que ambos quisimos lo mismo.

Pequeñas risas eran las que decoraba el ambiente en ese momento, pero ese cumpleaños no iba a estar terminado sin algo más...Los regalos.

- Bien, supongo que puedo pasar al siguiente paso de esta fiesta improvisada - Dijo el pelinegro dirigiéndose hacia la habitación para tomar unas cosas.

- ¿Ahora es cuando me haces un set privado? - Se animó a bromear.

Con una gran sonrisa en su rostro, Jungkook volvió a la sala de estar - Podría hacerlo si quisieras, pero te debo la parte de los saltos, si salto me muero, también si agito mucho los brazos.

Y una carcajada fue lo que se le escapó al castaño, si, el pelinegro estaba totalmente herido, pero aún así lograba hacerlo reír.

- Bien, supongo que el set va a ser cuando te sientas mejor.

- Me agrada esa idea, además todavía te tengo que enseñar unos trucos, podríamos ver eso - No era mala idea - Pero primero...- Y antes de poder seguir, un sobre y una bolsa chiquita fueron dejados en la mesa - Tus regalos.

- Curioso...el otro Nochu me hubiera comprado un auto - Y seguía bromeando.

El DJ rió - Ese era el plan B, si este falla, tenes tu auto.

No era un ambiente para nada incomodo, incluso podía decirse que la idea de estar toda la tarde así les causaba ilusión a ambos.

- ¿Cuál debo abrir primero? - Preguntó un tanto intrigado.

Aura Forever - Kookmin (Aura Pt.III)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora