Mi esposa me mima demasiado

Prólogo

Ji Yan descubrió que su esposa, que lo odiaba tanto que deseaba que estuviera muerto, había perdido la memoria después de un accidente automovilístico. Había cambiado tanto que era como si fuera una persona totalmente diferente...

Cuando va a trabajar: "Querida, no te muevas, te pondré los zapatos".

Cuando está comiendo: "Querida, he hecho todos tus platos favoritos. Has trabajado duro, así que come".

Cuando terminó de trabajar: "Querida, has trabajado todo el día. Te masajearé los hombros y los pies".

Ji Yan: "..."

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Tang Tang fue empujada al estanque por su hermanastra que la intimidaba con frecuencia. Pensó que conocería a su madre muerta, pero, quién sabía, cuando volvió a abrir los ojos, estaba en un lugar extraño. Pero lo que la hacía feliz era que tenía un marido súper guapo y un hijo muy lindo. Lo más importante era que su esposo era bueno. Era un héroe que protege al país y gana dinero para mantenerla a ella y a su hijo. Además, solo la tiene como esposa, no tenía concubinas ni nada. Tang Tang decidió que debía ser sumisa a su esposo, ser una buena esposa y una madre amorosa. ¡Su niñera ya no tenía que preocuparse de que ya no pudiera casarse!