ᴘᴜᴇᴅᴏ ᴘᴇɴsᴀʀ, ᴘᴜᴇᴅᴏ sᴇɴᴛɪʀ, ᴘᴜᴇᴅᴏ ʀᴀᴢᴏɴᴀʀ ʏ ᴘᴜᴇᴅᴏ ʜᴀʙʟᴀʀ...ᴘᴇʀᴏ ᴀᴜ́ɴ ᴀsɪ́ ᴛᴇɴɢᴏ ᴍɪᴇᴅᴏ...ᴘᴏʀǫᴜᴇ ᴀ ᴘᴇsᴀʀ ᴅᴇ ᴇsᴏ ʏᴀ ɴᴏ sᴏʏ ʜᴜᴍᴀɴᴀ.
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El planeta entero está bajo los efectos de una mutación que convierte a los humanos en criaturas i...
Con pereza y cierta debilidad Deva logró entre abrir los ojos, acostumbrándose a la luz que iluminaba la habitación y al dolor que aún punzaba en su hombro. Estaba recostada en la litera de su celda, y había una gran figura que la acompañaba guardando sus pertenencias en la mochila que ella siempre suele usar.
Daryl tenía un semblante serio, pero tomaba sus cosas y las guardaba con sumo cuidado, incluso había colocado nuevas flechas que él mismo le había fabricado. A Deva se le hizo un detalle muy lindo, sintiendo su corazón cálido. También se dio un golpe mental al ver qué había dormido más de lo planeado.
—Al fin despiertas —Murmura el ballestero al notar que estaba siendo observado por su amiga.
—Perdona —El Dixon toma asiento en la esquina del colchón, cerca de ella—. ¿Dormí demás?.
—Sí. Pero estás herida, es normal que lo hagas.
Daryl no puede evitar recordar cuando llegó a la prisión con la chica en brazos, ensangrentada y demasiado frágil. Jamás olvidaría el momento en que la encontró tirada a punto de morir, creyendo que nunca la volvería a ver sonreír o que jamás volvería a verla bromear con él. No hubo ni un segundo en el que dejara de rezar para sus adentros por la salud de su amiga, y al fin pudo comprender lo que tuvo que sentir Rick cuando la llevó por primera vez a la granja de los Greene.
Por suerte, Hershel la atendió rápidamente. Todos le preguntaron preocupados a Daryl sobre lo que pasó y les explicó lo poco que Deva le contó. Rick estaba furioso en ese momento, no se despegó de la litera de su hija hasta que ella recuperó la conciencia y le dijo con sus propias palabras que estaba mejor.
La de ojos verdes aún tenía presente los ojos llorosos azules de su padre y hermano, y sentía culpa por haberles hecho pasar aquel susto –de nuevo–. Hershel también le dijo que estaba sorprendido de ver que había resistido todo el camino, y ella supuso que la cosa que tenía enredada en su cerebro tenía algo que ver con eso. Después de todo, no por nada tenían una relación “simbiotica obligatoria”.
—Con cuidado —El cazador le ayudó a enderezarse. Y por más que le gustaría decirle que no se moviera y descansara otro rato, en estos momentos era prácticamente imposible, pues debían moverse y estar listos para la “visita” del Gobernador.
Observó con más detenimiento el rostro de la chica, la cuál rebuscaba entre sus cosas una playera limpia. Tenía unas horribles ojeras y su piel era más pálida de lo normal a causa de haber perdido demasiada sangre en todo un día. Hershel le advirtió que no se preocupara, pues era normal y solo necesitaría dormir un poco más ya que la operación había sido exitosa, además de que Rick le había donado nuevamente de la suya.
