Loto Oculto

Parte 38

La segunda boda fue planeada meticulosamente por todos los miembros de la secta Lan.

Lan ChangLe trajo rollo tras rollo de telas rojas para que Wei Wuxian eligiera la tela perfecta para sus túnicas de boda.

"Todas son muy hermosas." Dijo él, sosteniendo a Lan Xia en su regazo. La niña tenía un pincel en la mano y cada cierto tiempo mordía el mango y lo llenaba de saliva. "Pero me gustaría una sin bordados. Quisiera llevarla con la abuela Wen y que ella borde algo para mi."

"La boda será en pocas semanas, Lan furen, ¿Wen popo podrá bordar la túnica en ese tiempo? Hay que considerar el tiempo para construir el traje también."

Wei Wuxian lo pensó detenidamente. La abuela Wen ya no era tan joven como antes y sería dificil para ella. Tal vez debería dejarla descansar.

"Bueno... ¿Cuál te gusta a ti, A-Xia?" Le preguntó a la pequeña. Lan Xia agitó los bracitos y rió, todo era tan rojo y divertido. "Supongo que tendré que elegir yo sólo, eres muy indecisa."

"La tela para la túnica de Hanguang Jun ya fue elegida. Pienso que cualquiera que tenga los fénixes será el complemento perfecto." Dijo Lan ChangLe.

"Como era de esperarse de Lan Zhan, él eligió rápidamente." Wei Wuxian vio las telas rojas nuevamente.

Si Lan ChangLe sugería escoger telas con fénixes, eso significaba que Lan Wangji había elegido una tela con dragones. Los dragones en el novio y fénixes en la novia significaban que su matrimonio sería largo, armonioso y fértil. Wei Wuxian sonrió.

Lan Wangji quería que ese matrimonio durara mil años o más y su amor fuera eterno. Como era de esperarse de Hanguang Jun.

"Supongo que tendré que elegir una de estas tres..."

Finalmente eligió una con delicados bordados de fénixes a medio vuelo. Lan ChangLe se retiró con las telas, satisfecha con aquello, y dijo que enviaría la tela a las costureras para que la túnica estuviera lista lo antes posible.

Wei Wuxian se entretuvo jugando con Lan Xia. Desde que la más pequeña señorita Lan nació, nunca quería separarse de su madre. Lloraba si la colocaban en su cuna y si no podía ver a su madre o percibir su aroma. Era muy apegada a Wei Wuxian, y probablemente era la única que era más parecida a él. Sus otros hijos parecían todos pequeños clones de Lan Wangji, con sus trajecitos impecables y sus ojos dorados.

Sus otros hijos eran figuritas de jade inalcanzables. Pero Lan Xia era toda de Wei Wuxian.

Más tarde, otro discípulo trajo opciones de decoraciones florales, y otro más le trajo a probar diferentes comidas para el banquete.

"Lan furen," comenzó tímidamente el discípulo, "si usted y Hanguang Jun ya están casados, ¿por qué harán otra boda?"

"Eres muy joven para saberlo, pero cuando Hanguang Jun y yo nos casamos la primera vez, los dos pensábamos que este era un matrimonio sin amor. La verdad es que no me acuerdo de mucho de lo que pasó en la boda, pero a partir del momento en que admitimos que los dos sentíamos amor por el otro, todo lo que hemos vivido juntos, no he sido capaz de olvidarlo."

"Hanguang Jun y Lan furen han tenido un matrimonio tan largo y armonioso, me sorprende saber que hubiera un momento en que no se demostraran cariño." Comentó el discípulo sorprendido. "La verdad es que soy un Omega muy tímido, no tengo muchas esperanzas de encontrar a un Alfa que me trate como Hanguang Jun trata a Lan furen."

"No digas tonterías, seguramente habrá uno allá afuera que te amará con absoluta devoción."

Wei Wuxian deseaba que todos tuvieran la misma fortuna que él. Después de todo lo que habían pasado juntos, él y Lan Wangji solo deseaban que el resto de su matrimonio fuera y siguiera siendo tan perfecto como ahora.

***

Después de varias horas de revisar preparativos, Wei Wuxian estaba exhausto.

Lan Wangji llegó a la casa con los niños, y todos fueron calladamente a lavarse para cenar. La cena pasó en silencio y luego todos hicieron sus deberes en silencio.

Lan Xia jugaba sobre un pequeño colchón, luego se levantó de pronto.

"¡Lan Zhan, mira!" Señaló Wei Wuxian, Lan Xia dio dos pasos y luego cayó sobre el regazo de Lan Wangji. "Nuestro pequeño botón de flor, aiya."

Wei Wuxian se limpió una lágrima imaginaria, mientras Lan Xia reía y era sentada en el regazo de su padre. Dio un manotazo al guqin y se sorprendió al vez que podía hacer ruido, luego comenzó a jugar con las cuerdas.

"Creo que a nuestro botón de flor le gustará el guqin también." Comentó Wei Wuxian.

"A-niang," Lan Yuehua se sentó al lado de su madre, "si A-Xia quiere aprender después, podemos enseñarle."

"Aiya, mi primogénita, tan buena hermana mayor."

Lan Yuehua era diligente y aplicada en sus estudios, parecía sentir que al ser mayor que sus otros hermanos, tenía un peso mayor sobre sus hombros.

Lan Chengmei y Lan Sizhui tenían que recordarle amablemente que ellos eran los hermanos mayores y que ella no tenía nada que demostrar. Pero era digna hija de Hanguang Jun y quería ser el ejemplo a seguir de sus hermanos.

Lan Yunru, Lan Yanlin y Lan Yanmei la admiraban, ella no podía hacer nada mal.

"A-Xia decidirá cuando sea mayor qué instrumento desea tocar." Aclaró Lan Wangji. "Por ahora, sólo está jugando."

Antes del toque de queda, los pequeños Lan ya estaban bañados y cambiados para ir a dormir. Los mayores no tenían problema con dormir por su cuenta, pero Lan Xia absolutamente debía dormir con sus padres.

Wei Wuxian y Lan Wangji la vieron dormir plácidamente en medio de ambos. Wei Wuxian acarició su suave mejillita con delicadeza.

"Lan Zhan, tengo algo que contarte."

Lan Wangji alzó la vista con curiosidad.

"Cuando esperaba nuestro primer bebé, tuve un sueño. Estaba en el prado de los conejos, y había un pequeño conejito negro en el prado. Salió corriendo y lo seguí, y llegó hasta la casa de gencianas.

Al llegar ahí, me di cuenta de que estaba diferente, y había una mujer vestida de blanco ahí, que me decía que no era el momento todavía. Luego desperté, y días después perdí a mi bebé."

"Wei Ying." Lan Wangji quería decirle que no tenía que hablar del bebé que habían perdido, pero Wei Wuxian nunca habló de eso antes.

"El día que supe que esperaba a Lan Xia, también soñé que estaba en el prado de los conejos, y había un conejito negro. Pero esta vez el conejito saltaba a mis brazos y me miraba. Luego se movía como si tratara de ocultarse entre mi ropa."

Wei Wuxian miraba a Lan Xia dormir, luego alzó la vista. Lan Wangji parecía confundido.

"Creo, que el conejito negro que huyó antes, y el conejito negro que saltó a mis brazos después... Creo que podrían ser el mismo conejito."

"Wei Ying."

"Nunca lo había pensado, pero tal vez A-Xia es ese bebé que perdí. Tal vez definitivamente quería que fuera su madre."

Lan Wangji lo abrazó, y ambos abrazaron a Lan Xia, que se quejó un poco en sueños pero no despertó.

Tal vez sólo era una coincidencia, pero Wei Wuxian quería creer que el bebé que le habían arrebatado tan cruelmente finalmente estaba en sus brazos. Al final quien le hizo daño no había ganado.

Tenía a su familia completa.