Am I The Only One - Junhao (Jun & Minghao de Seventeen) [Adaptación]

Capítulo 13 - Twelve: Magnectic moon

Abrir los ojos y tener una primera imagen de Jun tallando los suyos con una de sus manos y una pequeña mueca en sus labios sin dudas se volvió una de las memorias favoritas de Minghao.

Ambos recién se estaban acostumbrando a la iluminación de la habitación. Se habían quedado dormidos juntos.

Todo porque Jun estaba cansado y Minghao no quería desaprovechar esa oportunidad.

—¿Cuándo me dormí? —preguntó en voz baja, sentándose sobre el suave colchón del menor.

—Mientras hablábamos. Debe ser cansador estar en dos escuelas.

—Sí. Lo es. Pero es que me gusta mucho actuar —respondió con una brillante sonrisa—. Espera... ¿Cómo sabes lo de mi otra escuela?

—Me lo contó un pajarito... —...llamado Wonwoo.

Wen río y se estiró levemente.

—¿Dormí mucho?

—Yo también me dormí junto a ti... Son las 7:11 pm justo ahora. Dormimos unas 3 horas.

—Wow.

Entonces en ese momento una cosita peluda se acercó a gran velocidad y se subió a la cama de un salto.

El omega alarmado se acercó al alfa por inercia y trató de ocultarse tras la espalda de este.

Pronto escucho la risa del menor.

—No tienes nada que temer, Junnie. Es sólo Shiro, mi mascota —habló calmadamente para luego sostener la tierna bolita de pelos diminuta que cabía perfectamente entre sus grandes y varoniles manos.

El pequeño perrito ladró de manera chillona y luego sacó su lengüita mientras movía su minúscula cola.

Jun salió de su escondite mirando el pequeño bulto peludo color blanco en las manos de su alfa y luego de hacer un sonido parecido al de un lobo bebé, sonrió y se lo quitó a Minghao para luego abrazar a la pequeña cosa.

—Oww, es muy bonito. ¿Desde cuándo lo tienes? —preguntó acariciando su pelaje, mientras sonreía contento, el cachorro estaba más que feliz con sus mimos.

—Hace dos meses. Es uno de los cachorros que tuvo la mascota de Chenle —le contó para luego reír un poco.

Le encantaba ver lo felices que se veían su mascota y omega juntos. Ambos siendo enormemente adorables.

—Alfa, no se quien es ese Chenle, perdón —respondió sin mirarlo.

—Es mi primo. Ese alfa de pelo naranja, al que seguramente viste salir de mi habitación hace unas horas, omega.

—Oh... Sí —hizo memoria y luego jugueteó con el pequeño Shino—. Ay, apenas lo conozco hoy y ya me lo quiero quedar.

—¿Cómo mi chaqueta? —Xú recordó y recibió una mirada de reproche.

—¡No! —dijo firme—. Yo sólo lo dije porque me gustaba mucho. Además no me quedaría con tu mascota. No pienses eso tan feo de mí.

—Yo solo pienso en lo precioso que eres, Jun —confesó y vio al otro sonrojarse sin poder evitarlo.

—B-basta, alfa —pidió.

Luego de un minuto de silencio el chico de cabello azul y violeta volvió a hablar.

—Por lo que veo, a Shino también le gustas. Así que te propongo algo —tomó al mayor del mentón, quien no tardó en ponerse un poco nervioso—. Podemos cuidar de él entre los dos. Puedes llevarlo a tu casa incluso, no me molestaría... Además, pienso que es la excusa perfecta para seguir viéndonos más seguido.