El cuerpo desnudo, lívido e inmaculado del omega se retorcía en el colchón, provocando que un desastre de sábanas, algunas prendas de ropa y almohadas se formara en su cama.
La lengua de su alfa lamía con entusiasmo uno de sus rosados y efectos pezones. Mientras que el otro era atendido por sus dedos. Oleadas de placer le sacudían y el lubricante salía de su entrada por cantidad.
Estaba tan húmedo... Tan listo para recibir, absorber y apretar el miembro del alfa.
—M-marlon... —balbuceó su nombre en un suspiro apenas audible.
Sin embargo escucharle para Xú fue toda una gloria. Jun estaba a su completa disposición.
Aunque Minghao le recordaba a su animal interno -quien quería dominarlo- qué solo estaban haciendo eso porque su omega lo necesitaba.
Uno de sus varoniles y venosas manos acarició la -exageradamente estrecha y bonita- cintura de avispa que poseía el menor. El alfa no podía dejar de sorprenderse al ver lo diminuta que era esta. Incluso temía ser brusco por miedo a romperle. Wen tenía cuerpo de barbie.
Sus muslos no eran ni muy delgados, ni muy rellenos, estaban a la medida exacta, y sus caderas... Uhm, eran algo anchas... Aún no tenía la oportunidad de observarle por detrás pero a juzgar por lo suaves -y que de cierto modo no cabían completamente en sus manos- el rubio poseía unas nalgas de ensueño.
No lo juzguen. Minghao no era un superficial. Él sólo quería grabar en su memoria la mayor cantidad de detalles posibles sobre su omega.
Jun por su lado apretaba los fuertes brazos del alfa y de vez en cuando sus curiosas manos lo toqueteaban.
Sino fuese porque estaba en celo, sin dudas habría alucinado al ver el cuerpo tonificado que poseía su destinado.
Aunque sin dudas lo que le hacía ver más atractivo era esa esbeltez que poseía.
La manera en la que sus músculos se tensaban o como las venas resaltaban -está siendo producto de la ejercitación diaria del más alto- ... Joder...
Y las expresiones faciales de Xú tampoco ayudaban. Su ceño se fruncía y lo hacía ver más caliente todavía.
A pesar de su poca -cero- cordura, Wen chilla emocionado al ver el miembro que tiene el chico de 23 años entre sus marcadas piernas. Era muy grande, grueso y para rematar, unas venas resaltaban al igual que el color rosa intenso de su glande.
La boca del omega se hizo agua... Nunca en su vida imaginó estar a tan sólo un paso de ser tomado por alguien que estuviese tan bueno de pies a cabeza.
Y el cuerpo de Vernon no era broma... pero Xú Minghao era otra onda.
Su respiración se agitó y tras gemir bajito más lubricante salió de su interior... estaba tan necesitado.
—A-alfa... acá —el joven omega abrió más sus piernas tomando el palpitoso órgano -y no precisamente el corazón- del alfa, para dejarlo a unos centímetros de su entrada.
—Agh... — el menor gimió ronco al sentir la mano de su destinado agarrar su pene.
Wen estando en celo se volvía algo travieso, y Minghao era sensible. Mierda, Jun le había apretado -en el proceso- un poco la polla, por eso se le escapó un gemido.
—Alfa... Al-fa... por favor —lloriqueó moviéndose inquieto.
Xú aún trataba de estabilizar su respiración. Lo debía hacer con urgencia o se ahogaría en excitación. No quería terminar siendo dominado por su lobo. Este en su interior sólo quería follarse al omega, morderlo, marcarlo, reclamarlo como suyo y darle su nudo hasta asegurarse de que sus cachorros estuviesen en el plano abdomen del mayor.
Cuando estuvo más equilibrado tomó al de cabellos rubios y piel dorada de los muslos e insertó solamente la punta de su pene en su interior.
Wen suspiró con sus manos agarrando con algo de fuerza las sábanas que eran aplastadas por el peso de su cuerpo.
Y cuando Minghao lo decidió, metió un poco más, disfrutando de las expresiones faciales que ponía él omega.
—Ahhh... Minghao —su voz sonó como si estuviese colgando de un hilo—. Hazlo —desesperado movió sus caderas de tal forma que sin más espera toda la larga longitud del mayor quedó en su interior.
Tan grande que de una había tocado su punto dulce.
Jun ahogó un grito y Minghao cerró con fuerza sus ojos.
Sin poder contenerse soltó un gemido ronco cerca del oído del rubio y al separarse y mirarle se sintió aún más excitado cuando vio a Web con los ojos cerrados y la boca abierta. Tenía una expresión de placer digna de ser fotografiada.
—Ahhhh... Ahhh... Alfa —fue lo único que logró balbucear el sumiso cuando la voz regresó a él.
Sus gemidos fueron bastante agudos.
Minghao agradecía que los padres de este no estuvieran. En serio se sentiría muy avergonzado de que escuchen a su ángel teniendo relaciones con él.
Jun estaba todo alocado por el celo, pero en su estado normal sólo era un chico demasiado adorable.
No quería que sus padres se llevasen una imagen mental de su hijo totalmente denigrante, sólo porque este estaba siendo dominado por sus instintos animales durante su período que duraría 72 horas y apenas habían pasado unas pocas. Como mucho 10.
Cuando vio al mayor desesperarse, se comenzó a mover. Creando un vaivén que hacía a Jun volar prácticamente.
Su alfa... Su alfa lo hacía tan bien... Tan... Rico.
Este por su parte quería explotar. Jun era tan cálido, estrecho, húmedo... muy húmedo... y joder, se sentía tan bien estar en el interior de su predestinado.
Mientras más se movía más Jun pedía que lo follara. No quería que Xú fuese suave. Por ello, Minghao lo complació -aunque siempre teniendo cuidado- le dio tanto como él omega pidió.
—Hao... duro... más rápido, alfa.
Su plano abdomen estaba tenso.
Al alfa le daba mucha curiosidad escuchar cómo gemía su omega.
Será que a su lobo le agrada mucho.
Eso pensó y continuó con los movimientos pélvicos fuertes y acelerados, golpeando una y otra vez en el punto donde Jun chillaba y pedía aún más.
—Agh omega —gimió y cerró sus ojos con fuerza.
El rubio le estaba apretando tan deliciosamente. Y sin dudas el grito de placer que lanzó este cuando se vino fue música para sus oídos. Sin embargo con el orgasmo del omega le apretó aún más el pene -y eso le hizo querer venirse, no obstante, por más que su lobo no quiso- se negó. Xú salió de su interior y expulsó su semen sobre los muslos del omega que ahora ronroneaba y se quejaba porque quería el nudo de su alfa.
No podía embarazar a Jun... aún no.
Luego de que se calmó, se dispuso a limpiarlo, mientras dejaba besitos en el cuerpo ajeno. Él omega ahora dormitaba.
Esa era una buena señal para Minghao. Podría estar tranquilo y un poco más preparado para cuando él mayor despertase necesitando su atención otra vez.
La próxima no se permitiría pasar un susto como en la primera. Se pondría aquel jodido condón de látex para cuidar más de su precioso ángel, quien este sueños hacía sonidos y se movía en la cama buscando el calor corporal del alfa.
—Hermoso —Minghao le besó uno de los cachetes y lo abrazó con amor, sintiendo al otro acurrucarse a gusto.
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Perdón, perdón y perdón por haber tardado tanto en actualizar. A veces es muy difícil que den los tiempos para subir nuevos capítulos.
Espero que disfruten mucho este ❤️🔥❤️🔥❤️🔥❤️🔥❤️🔥
Dedicado a Imaginary1231 💖 por esperar todo este tiempo!
Gracias💕
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Am I The Only One - Junhao (Jun & Minghao de Seventeen) [Adaptación]
RomanceJun, un bonito omega, tiene al alfa equivocado, sin dudas Vernon no podría ser su destinado... Y se da cuenta de esto cuando siente aquella rara, inexplicable, fuerte y emocional conexión con Minghao, el nuevo y atractivo alfa que ahora trabajaba en...