Am I The Only One - Junhao (Jun & Minghao de Seventeen) [Adaptación]

Capítulo 14: Thirteen: Dive into your heart

El teléfono pegado a su oído y la vista puesta en la piscina. Minghao se encontraba llamando a su omega mientras miraba por el amplio ventanal de su recámara.

Al tercer tono se escuchó la voz de Wen.

—¿Hola?

—Jun, hola —le saludó de vuelta.

—Minghao... ¿Cómo estás? ¿Ya te sientes completamente bien, alfa? —Xú no pudo evitar reír ante la tierna preocupación del mayor.

—Sí, ya estoy bien, Junnie. ¿Tú qué tal estás?

—Uhh, estoy bien... Shino y yo te extrañamos.

¿Puedo derretirme? Quiero derretirme.

Minghao se sentía flotando entre nubes color rosa cuando escuchó tal confesión.

—También los extraño. Ambos son mis adorables cachorros —escuchó la risa de Wen—. ¿Tienes planes para mañana?

—Uhh, no alfa, ¿por qué?

—Bueno... ¿Te gustaría salir conmigo? Pasar el día juntos... Con Shino también —comentó.

—Me encanta la idea, Hao —aceptó y ambos rieron bajo.

—Entonces mañana paso por ti a las 10:00 am, ¿te parece?

—Estaremos esperándote, Hao.

—Bien, nos vemos.

—Adiós —colgaron y Minghao se quedó con una sensación bonita en el pecho.

Y cuando se volteó se llevó el susto de su vida al encontrarse con Chenle acostado en su cama, como si estuviese en la playa, viéndolo.

—¿Qué haces aquí, pedazo de idiota? —cuestionó tratando de regular su agitada respiración, llevándose una mano al pecho.

—Ay, primo, pero no te enojes... Solo vine a pedirte un consejo; como tú eres un tipo sabio, con experiencias y esas cosas —soltó gesticulando con su diestra.

—Me estás diciendo viejo.

—Lo estás.

—Tengo 22 años.

—Lo estás —reiteró—. En fin, a lo que venía... Jisung quiere que lo marque.

—Ajá, ¿y? —habló despreocupado, tomando asiento en la silla giratoria de su escritorio.

—¿"Y"? ¿Cómo que "y"? —escandalizó.

—Sí. No veo cuál es el problema. Just do it —levantó sus hombros.

—El problema es que tengo miedo al compromiso. No me siento listo para estar atado a alguien.

Sus palabras hicieron a Xú meditar por unos segundos.

—Mira... Ya sé de tu pánico, pero te juro que si fuese a mí que mi omega destinado me dice que lo marque no dudaría en hacerlo. Lele, Jisung es tu omega. Él quiere un alfa que lo cuide y consienta. Estoy seguro de que solo hace lo que tú, eso de la relación "open mind", porque se lo pediste. No creo que realmente sea lo que quiere. Y justo te lo dio a demostrar cuando te pidió que lo marcaras. Él quiere que se pertenezcan mutuamente, más él a ti, que tú a él, pero él punto es ese —explicó analizando la situación—. No sería prudente de tu parte dejarlo pasar. Si algún otro alfa lo marca, aunque no sea el suyo, perderá la conexión contigo... Y tú lo perderás todo.

Zhong suspiró mirando al techo.

—No te estoy diciendo que vayas ahora mismo y le claves los colmillos en el cuello. Solo quiero que lo pienses bien. Él te necesita tanto como tú lo necesitas, por las que trates de evadir el asunto. Y realmente lo lamento por ti, porque sé que esto te tiene asustado, pero debes aprender a aceptar las cosas como en realidad son.

—¿Y tú crees que estar vinculado de esa forma a él me hará feliz? —dudó.

—No podrías saberlo si ni siquiera lo dejas intentarlo, Chenle.

El pelinaranja solo se quedó en silencio. Tenía mucho que pensar luego de esa conversación con su sabio primo.

Jun acariciaba a Shino mientras conversaba con Vernon. El menor le estaba contando cómo iban las cosas con Seungkwan. Y todo estaba de maravilla.

—¡Oh! Había olvidado contarte que Minghao me invitó a pasar el día de mañana juntos.

—Entonces me toca usar mis dotes de modelo para escoger tu outfit —alardeó y sin más fue al closet de Wen.

Jun se puso contento cuando vio a su novio escoger un bonito conjunto para él.

—Sabes, Hansol... Creo que deberías invitar a Seungkwan a tu casa... A ver películas —dijo sonriente viendo cómo el menor agarraba al cachorro y jugaba con él.

—¿Estarás bien con eso?

Qué considerado.

Jun asintió feliz.

—Sí. Creo que es tiempo de que tú y él avancen un poco más —confesó de forma segura.

Vernon cada vez más sorprendido por su madurez.

—De hecho, me gustaría conocerlo. Quiero saber cómo es él omega de mi estadounidense favorito —comentó mirando cómo el pequeño perrito color blanco se perseguía la cola a un lado de Vernon.

—Jun... —se rió—. Yo también quiero conocer al alfa de mi chico favorito —concordó.

—Entonces deberíamos ir a una cita doble, cuando ya estemos totalmente cómodos y acostumbrados a ellos.

Su propuesta hizo al castaño sonreír de su particular manera.

—Me parece buena idea, chico bonito.

Abrió sus brazos y pronto tuvo a Jun entre estos.

En serio ellos dos se querían mucho.