Capítulo 05: Lo que nos Daña y hace Fuertes.

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Buenas gente de Wattpad, aquí está Lord Belias con un nuevo capítulo de está historia, que parece que va para largo, ya he decidido que va estar y que no dentro de la historia, ahora solo estoy aclarando un par de ideas para que esto no sea eterno, por mi parte no tengo mucho más que decir, tan solo que disfruten del capítulo, es el más largo de esta historia hasta el momento, unas 24 mil palabras, que espero no sean muy redundantes, otra cosa que quería saber, es ¿Si quisieran que fueran más cortos o si con esa extensión están bien? Bueno, ya no les sigo haciendo perder su tiempo, y que comience.

Dicen que se aprende más de los errores que de los aciertos, puede ser cierto, pero existen quienes por pura terquedad, se niegan aceptarlo. El ideal de perfección, muchas veces puede hacer que alguien sea el peor de todos, negar los fracasos, ocultar las verdades modificando los hechos, humillar a otros para sentirse mejor consigo mismo, son cosas que alimentan a una falsa soberbia, una tan frágil como el cristal. Los que nunca caen, nunca aprenden a levantarse, y una vez que ese palacio que crearon el cielo se desmorona sobre ellos, son incapaces de regresar a la realidad.

Hubo alguien que era el reflejo de todo aquello, un hombre que despreciaba a otros sin razón alguna, y sobre todo a ese, al que todo el mundo consideraba, como la perfección absoluta. Hubo alguien que solo sentía odio hacia Bell, a pesar que nunca llegaron a hablar ni una vez, y ahora que el último de los Argonautas había desaparecido, creía que sería su oportunidad, de alzarse como el nuevo héroe, a pesar que durante el combate contra las 3 bestias, se ocultó como un cobarde, y como era de esperar, su egolatría lo dejo a merced de la realidad en el momento menos oportuno, y su suerte fue la peor de todas.

- ¿Por qué? ¡¿Por qué tiene que pasarme esto a mí?! Se suponía que era mi momento, que a partir de ahora la historia solo mencionaría mi nombre ¡¿Por qué demonios debo terminar de esta manera?! - gritó con todas sus fuerzas, mientras era rodeado por una cantidad inmensa de monstruos.

Aquel joven seguía caminando en las nubes, su pasado estaba muy aferrado en su mente, un distante recuerdo que era incapaz de olvidar, de cuando en su pequeña ciudad era considerado como un prodigio, incluso muchos de sus conocidos, llegaron a considerarlo como un posible Argonauta, palabras que muy rápido se le subieron a la cabeza, y desde el momento en que se unió a una familia, esa vanidad solo lo seguía consumiendo. Sin dudas era fuerte, nadie podía negar su talento, pero tampoco esa repugnante actitud que poseía, llegando a despreciar de forma descarada a quienes no eran como él.

Viajó a Orario al pensar que un lugar tan insignificante, no podría lograr eso para lo que estaba destinado, viajando a la ciudad en donde se decía que nacía los héroes. Todo era muy diferente en ese sitio, había tantos dioses, que era imposible no toparse con uno en cada esquina, y estos siempre estaban buscando a buenos reclutas para alzar sus nombres. Aquello lo hizo sentir que la gran oportunidad se acercaba, y que mejor para demostrarlo, que el festival de la academia, el lugar donde los novatos demostraban su talento, los dioses elegían a cuál de ellos tomar, y ahí estarían presentes las más grandes familias.

Mientras buscaba aquel lugar, aquel chico se encontró con una joven recepcionista del gremio, una chica mitad elfo, que de inmediato lo había dejado cautivado - disculpe señorita, mi nombre es Galand, estoy buscando información sobre el festival de la academia - dijo este mostrándose muy educado, actuando de forma elegante para dejarla impresionada - mucho gusto, soy Eina Tulle, ahora mismo me dirijo al gremio, ahí puedo decirte lo que necesites - ella también actuó de forma muy educada al hablarle. Galand sintió que había comenzado de buena manera, que ya la tenía en sus manos, ya que a sus ojos, ninguna mujer podría negarse a estar con él, pero ella solo estaba haciendo su trabajo.

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El último ArgonautaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora