DIFICIL

DIFICIL 19

BELLA

Estábamos saliendo de trabajar como siempre cagadas de risa. Maca fue y es mi mejor amiga de casi toda la vida, nos conocimos en 6to de primaria y desde ahí no nos separamos más.

—Vamos a tomar un taxi allá en la esquina quede con Exe que me pasaba a buscar por casa—dijo ella para empezar a caminar a la esquina.

—Da boluda vamos en cole dale—dije con un mal presentimiento.

—No dale, aparte ya es tarde boluda ni ganas de esperar el colectivo—dijo mientras paraba un taxi.

Con pocas ganas abrí la puerta de atrás para subirme, ella se subió en el asiento de copiloto, íbamos hablando mientras ella me hacía reír con las estupideces que decía, pero lo último que escuché fue su risa muy lejana a la par de un impacto.

Cuando me desperté estaba en el piso con un dolor muy fuerte que quemaba mi estomago y la pierna me costaba moverla, cuando me preste atención tenia un fierro del lado izquierdo de la panza, intenté moverme pero no podía lo primero que hise fue llamarla a Maca a los gritos pero no contestaba, me acomode apoyándome contra el auto volcado y la busque con la mirada cuando la encontré estaba a un par de metros de mi inconsciente, su cabeza sangraba mucho y una de sus piernas no se veía bien, estaba desesperada porque la llamaba y no reaccionaba a mi llamado.

—Maca!! Amiga por favor respondeme! Aguanta—le dije llorando desesperada.

Estaba casi inconsciente cuando sentí el sonido de sirenas acercarse al lugar, estaba a nada de perder la consciencia supongo que era debido a la gran cantidad de sangre que perdí.

—Me escuchas?—me preguntó una persona iluminando mis ojos con una linterna y asenti mientras murmuraba por Maca—quedate tranquila ya subieron a tu amiga para llevarla al sanatorio—dijo y como sabiendo que ya la estaban cuidando mis ojos se cerraron por completo dejándome inconsciente.

Me moví y me dolió todo el cuerpo, al abrir mis ojos los volví a cerrar debido a la luz, cuando me acostumbre pude notar que estaba en una habitación de un hospital y quise hablar pero mi boca estaba seca y rasposa.

—Maca—dije con mi voz rasposa y cerrando mis ojos.

—Shhh no hables quedate tranquila  que voy a buscar al médico—dijo Gigi y antes que se fuera la agarre del brazo.

—Donde está Maca?—pregunté desesperada a la par que lágrimas se acumulaban en mis ojos.

—Vos tranquila si? Voy a buscar al médico y después te digo—dijo para después salir de la habitación.

Ustuve horas con médicos haciéndome estudios y nadie decía nada de Maca estaba preocupada, cuando alfin terminó esa serie de estudios me llevaron a una habitación que no era en la que me desperté.

—Bueno Isabella tenemos buenas noticias esta todo bien en usted ya, lo malo es que va a tener que usar muletas por unas semanas—dijo el médico.

—Me pueden decir donde esta Macarena por favor—dije con lágrimas cayendo de mis ojos.

—Yo los dejo—dijo el doctor dejándome con casi todos en la habitación.

—Donde está?—le volví a preguntar a Gigi.

—Esta en terapia intensiva inconsciente. Maca está en un coma Bella—dijo y yo solo pude llorar mientras tapaba mi cara.

—Y que tiene?—pregunté con un sollozo de por medio.

—Una lesión y contusión cerebral, además de que una de sus piernas está casi destruida tiene que hacer sesiones de kinesiologia—dijo ella y yo solo lloré más entendiendo que ese era el mal presentimiento.

—Que fue lo que paso Bella?—me preguntó Exequiel, pero no respondí no quería hablar con nadie de lo que pasó.

—Quiero estar sola—dije.

—Pero decinos que pa..—decía Exequiel.

—QUIERO ESTAR SOLA DIJE—grite para que después todos salieran de la habitación.

Cuando pude averiguar algo me entere que había estado tres inconsciente,  tres putos días. Todo el tiempo mi mente repetía una y otra y otra vez el suceso de lo que pasó, me estaba torturando. Todos venían a sentarse al lado mío y me hablaban sin obtener respuesta, no sé callaban un segundo y se iban cuando terminaba la visita sin respuesta a nada.

Mi mente aparte de repetir sucesos del accidente, repetía recuerdos con ella, muchos recuerdos que me torturaban y me hacían pensar en porque no le insistí un poco mas en irnos en colectivo.

Solamente me quedaba rezar que mi persona saliera adelante que no me abandonará y me dejara sola con toda esta tortura.