Checkmate Benny Watts x OC

Sinceramente

Emilie Harmon había llevado estas cartas desde Nueva York hasta Kentucky y de regreso y ahora iba a leerlas sola en el mismo lugar donde habían sido escritas.

Querida Emilie,

No he escrito una carta real en mucho tiempo.

Siempre he sido más una persona que habla, pero he estado pensando en ti, así que si es así como tengo que contactarte, que así sea.

Sabes, colgué uno de tus dibujos

Es un poco pequeño, pero aún así es una de mis únicas decoraciones de arte y me encanta.

Emilie no se había fijado en ninguno de sus dibujos, sobre todo teniendo en cuenta el tiempo que había pasado en ese apartamento. Así que lo buscó, enmarcado o algo así, pero no pudo encontrarlo.
Luego se levantó y miró hacia la cocina. Lo había colgado en su nevera, casi como una madre orgullosa. Esto la hizo reír para sí misma.
Los otros hombres en la casa estaban confundidos, pero ella regresó a la habitación para continuar leyéndolos a solas.

Querida Emilie,

Es un poco divertido cómo nuestras llamadas y estas pequeñas cartas se han convertido en parte de mi rutina. Me sentaré en mi mesa y hablaré contigo durante horas y luego me sentaré y escribiré.

Nunca hubiera pensado que estaría escribiendo estas pequeñas cosas.

Desearía saber por qué no estabas recibiendo estas.

Una carta tuya me daría otra cosa para colgar en mi pared.

Ella sonrió para sí misma. Había tantas cartas en la pila que las hojeó por encima.

Querida Emilie.

Sinceramente, no puedo creer ni la mitad de lo que pasó este fin de semana, y me besaste, de todas las cosas que me han pasado, todavía recuerdo vívidamente ese fin de semana, ese sentimiento.

Querida Emilie.

Sigues diciendo cosas como "Estoy hablando demasiado", pero no creo que puedas hablar demasiado. Me encanta escuchar tu voz y cómo cada vez que te emocionas por algo, tu conversación casi se convierte en una canción.

Querida Emilie.

Es tan raro estar escribiendo una de estas cartas contigo al otro lado de la mesa. Casi parece que tengo un pequeño secreto, pareces estar tan concentrada en tu dibujo, así que creo que me saldré con la mía.

Tus manos están cubiertas de carbón, pero tu mano aún se ve tan delicada.

Te acabas de manchar un poco en la cara, no sé si te lo voy a decir porque te ves tan linda.

Hubo muchas ocasiones en las que nos sentamos en silencio, simplemente disfrutando de la presencia del otro.

Querida Emilie.

Me sorprende lo hermosa que puedes ser. La mitad del tiempo solo estarás haciendo algo mundano y miraré hacia arriba, casi sentiré que todo el aire ha dejado mi pecho y solo pienso, Joder, ella es la cosa más hermosa que he visto en mi vida.