Habían cuatro paredes,
blancas como las nubes,
como el esperma en mi sabana,
como mis ojos en la nada,
como tu sonrisa provocada,
como la borrosidad
en las mañanas,
como tu alma cansada.
¿En que estaba? Ah si...Habían cuatro paredes.
Cuatro paredes
Habían cuatro paredes,
blancas como las nubes,
como el esperma en mi sabana,
como mis ojos en la nada,
como tu sonrisa provocada,
como la borrosidad
en las mañanas,
como tu alma cansada.
¿En que estaba? Ah si...Habían cuatro paredes.