chapter 18

1.7K 204 4
                                    

Me revuelvo el cabello mientras las primeras gotas comienzan a caer, de pronto un dolor punzante me revuelve el estómago y se complementa con la sensación de mal presagio

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Me revuelvo el cabello mientras las primeras gotas comienzan a caer, de pronto un dolor punzante me revuelve el estómago y se complementa con la sensación de mal presagio.

Aún peor es el hecho de que Jennie no haya contestado mis últimas llamadas.

Se suponía que debería haberme llamado luego de marcharse la noche anterior pero mi celular sigue con la casilla mensajes vacía y aún peor es aquel mensaje que llego esta mañana de un número desconocido portando un mensaje en blanco.

De repente noto de un movimiento al alzar mi cabeza como las patrullas de policía se habían estacionado fuera de la universidad y eso termina por dejarme sin el último gramo de aliento en mi cuerpo.

¿Qué está pasando?

¿De qué me perdí?

— Profesora Lalisa Manobal — Se dirige a mí un oficial con una pequeña libreta y un bolígrafo en manos, y de nombre Kim Kai — ¿Le molestaría contestarnos algunas preguntas?

— Sí. ¿Sobre qué? — Indago cautelosa.

— Sobre la desaparición de una alumna— Responde Kai para luego aclarar — Kim Jennie.

— Sobre la desaparición de una alumna— Responde Kai para luego aclarar — Kim Jennie

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

2 días antes.

Ella apareció unos segundos después de que Jennie abandonara mi oficina, con una sonrisa triunfal en el rostro y un nuevo lápiz labial color carmín.

Y pensé de inmediato en que cuando me abandonó creí que no podía odiarla más de lo que lo hice, increíble que hoy se haya superado así misma cuando me alejó de la única persona que me importaba en esto.

— ¿Cómo está la chica? — Preguntó soberbia y una sonrisa le inundó el rostro — Ya encontrará alguien más, el mundo es enorme para pequeñas oportunistas.

Saqué todo de mí para no gritarle que se vaya a la mierda, pero debía ser más lista que esto entonces fingí una vez más y le di una media sonrisa.

— Estará bien...— Caminé hacia ella y la tomé por la cintura — Tenías razón, sólo estaba siendo orgullosa.

Dahyun rió y reposo sus manos en mi pecho.

Sense | 𝗝𝗟Donde viven las historias. Descúbrelo ahora