Capítulo 19

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Hyukjae subió a su auto y solo fue capaz de quedarse sentado en el asiento del conductor con la mirada perdida hacia la nada, el tiempo parecía haberse detenido para él en aquel momento en el que vio a Donghae abrazando a otro hombre, sentía el corazón roto en miles de pedazos y no podía sacar de su mente la idea de Donghae siendo tocado y besado por otro.

Aún en silencio, calientes lágrimas se derramaron de sus ojos mojandole las mejillas y yendo a parar en su regazo mojandole también el pantalón y las manos que descansaban sobre sus propios muslos.

Estaba en estado de shock y recordó vagamente que se sintió del mismo modo en el pasado cuando su padre lo descubrió besándose en su cama con Donghae cuando eran unos adolescentes, solo que ahora esa sensación de entumecimiento era mil veces peor.

Definitivamente, había pedido por completo al amor de su vida. Y dolía, dolía tanto como le dolió tener que separarse de él en el pasado.

Con ambas manos se quitó las lágrimas de las mejillas, no sólo estaba sintiéndo dolor, también sentía rabia. Rabia contra su padre, rabia contra la sociedad estupida e injusta, rabia contra sí mismo por haber sido cobarde y no ser capaz de luchar por Donghae.

—Si hubiera escapado con él como me lo pidió, tal vez las cosas habrían sido diferentes. — murmuró para sí mismo en la soledad de su auto.

Encendió el vehiculo y condujo a casa, no le quedaba de otra más que aceptar que todo estaba perdido y no valía la pena seguir insistiendo.

Más tarde estando ya en casa, apago el celular y lo dejo olvidado en el sofá de la sala. Caminó cómo alma en pena hacia el mini bar y saco de este una botella de vodka, no se molesto en busca un vaso porque no le haría falta.

Destapó la botella, se dejó caer en el sillón que se encontraba frente al ventanal y mientras observaba las luces de los altos edificios de Seúl, comenzó a beber.

Hizo algo que en lo más profundo de su ser, sabía que no lo ayudaría en nada. No pudo evitarlo por más que lo intentó, con cada trago que bajaba por su garganta se imaginaba a Donghae siendo besado y tocado por otro.

Donghae, desnudo en una cama que no era la suya, con otros labios y otras manos recorriendo su cuerpo.

Donghae, entregándose a otro hombre, diciéndole cuanto lo amaba.

Bebió y lloró, lloró hasta que se le inflamaron los ojos.

Bebió hasta que el alcohol le quemó la garganta y siguió bebiendo botella tras botellas hasta que comenzó a sentirse entimecido en cuerpo y alma.

Bebió hasta que perdió el conocimiento.

🔹💠🔹


Tres días habían pasado desde que Siwon había visto o hablado con Hyukjae por última vez, su teléfono estaba apagado y aunque fue a buscarlo a su casa este no le abrió la puerta en ningún momento.

Siwon comenzaba a preocuparse, estaba en la oficina sentado frente al escritorio con el celular entre las manos observando el número de teléfono de Donghae, pensando si llamarlo o no para preguntarle si sabía algo de Hyukjae.

Tenía el presentimiento de que algo había sucedido entre ellos. Intentó de nuevo llamando a Hyuk, pero fue inútil. Estaba apagado, también el teléfono de casa.

Decidió ir de nuevo ese día al edificio donde vivía su mejor amigo, esta vez le pediría la copía de la llave al portero o llamaría a la policía para que tirasen la puerta abajo si era necesario.

Se puso de pie, guardó el celular en su bolsillo y estaba colocandose el abrigo cuando la puerta de la oficina se abrió, era Hyukjae y no se veía para nada bien.

Estaba pálido, tenía ojeras y los ojos enrojecidos e hinchados. Su cabello estaba desordenado y parecía haber bebido los últimos días. Normalmente, su amigo era muy cuidadoso con su aspecto físico, incluso con su ropa, por lo que Siwon supo que estaba realmente mal cuando lo vio vestido en un conjunto deportivo que parecía mas una pijama que ropa de salir.

—Hyukjae, hombre. ¿Donde te has metido? Llevo tres días tratando de saber de ti. — dijo Siwon viendo a su amigo pasar frente a él hacia el escritorio.

—Estaba en casa, no quería hablar con nadie. Siento haberte preocupado. —

—Hyuk... ¿que te sucedió? Sabes que estoy aquí para ti. Cuéntame. —

La mirada llena de dolor de su amigo le partió el alma.

—Tenías razón, Donghae tiene novio. Fui a su departamento para saber como estaba y su novio me abrió la puerta. Estaba... —

Hyuk se quedó en silencio unos momentos, con la mirada perdida.

—Bueno, era más que obvio que habían estado teniendo sexo porque el tipo abrió la puerta con nada más que un pantalón de pijama puesto y Donghae... —

Siwon se quitó el abrigo y fue a servirle a su mejor amigo una taza de café, dejó la taza frente a él y tomó una silla vacía para moverla y sentarse cerca de él.

Colocó una de sus manos en una de ls muñecas de Hyukjae dándole un apretón suave, quería reconfortado pero no sabía cómo.

—Lo siento, Hyuk. Lamento que hayas tenido que ver eso. —

Ninguno de los dos dijo nada por un momento, Hyuk tomó la taza de café y bebió un poco de este.

—¿Has bebido todos estos días? — tenía que preguntar.

Hyukjae solo asintió en silencio.

—¿Has dormido? ¿Comido algo? —

—No mucho... —

—Vale. No deberías estar aquí, vamos. Te llevaré a casa, Hyukjae. Dejaremos el trabajo para mañana, por hoy necesitas descansar y dejar de pensar aunque sea un poco. —

Aquel día y por primera vez en su vida, Hyukjae se desmoronó delante de otra persona. Dejó que Siwon se encargara de él porque realmente no se sentía capaz de hacerlo por sí mismo, no tenía la fuerza suficiente para nada más que llorar.


Luchando por su amor (Eunhae) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora