𝘍𝘐𝘍𝘛𝘏 𝘊𝘏𝘈𝘗𝘛𝘌𝘙

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Harry despertó temprano como de costumbre lo único que hizo que se sintiera un poco mejor esa mañana es que se iría de ese horrible infierno muggle, para irse a otro pero diferente más como un infierno de gente demasiado calurosa y axfisiante para el gusto de harry, pero cualquier cosa es mejor que los Dursley cualquiera.

Para antes de la hora del almuerzo harry ya había empacado todas sus pertenencias (énfasis en todas no le gustaba dejar sus cosas en esta casa),y ahora solo quedaba esperar hasta que fueran las cinco y rezar para que los Weasley no hagan algo muy inusual para llegar.

Harry después de comer solo un poco de el almuerzo, subió a su habitación solo para verificar que no se le quedara absolutamente nada no tenia nada de ganas de  volver a esta estupida casa, a eso de las cuatro y media bajo su baul para esperar al señor Weasley.

El ambiente en el número 4 de Privet Drive estaba muy tenso. La inminente llegada a la casa de los Weasley ponía nervioso e irritable a Vernon, que cuando Harry mencionó que los Weasley llegaron a las cinco en punto se asustó mucho.

—Espero que le hayas dicho a esa gente que se vista adecuadamente—gruñó de inmediato— He visto cómo van. Deberíantener la decenciade ponerse ropanormal—

Harry no era un gran partidario de los Weasley pero tenía la oportunidad de joder un poco a Vernon sin ningún tipo de consecuencia (al menos no inmediata) así que simplemente dijo lo que estaba pensando en ese momento

—Ese tipo de ropa es la normal para los de nuestra clase, y aparte para ti alguien debe ir vestido siempre como si fuera a cerrar un contrato o si no para ti no valdrá la pena entablar una conversación porque no luce como tu quieres, además aunque viniera vestido como tu quieres no lo respetaras ¿Sabes porque?—Harry hizo un pausa viendo que el rostro de Vernon estaba rojo y con una sonrisa dijo—Porque es un mago—

Listo Harry ya había mencionado esa palabra que estaba prohibida en esa casa

—Mucho cuidado con lo que dices chico no sabes a quién estás provocando alégrate de que no quiero tener que responder preguntas de ese así que no te castigaré, pero el siguiente verano pagaras caro o que dijiste—Vernon tenía su enorme rostro rojo de la cólera pero Harry noto que se estaba agarrando con fuerza del sofá para evitar ir y golpear a Harry.

Vernon se había puesto su mejor traje. Cualquiera podría interpretarlo como un gesto de bienvenida, pero Harry sabía que lo había hecho para impresionar e intimidar, aunque si se lo preguntaban a Harry diría que Vernon siempre lucía ridículo con esos horribles trajes.

Su estupido primo, por otro lado, parecía algo disminuido por el pánico. La última vez que Dudley se había encontrado con un mago adulto salió ganando una cola de cerdo que le sobresalía de los pantalones, un recuerdo brillante y feliz si se lo preguntan al azabache.

Petunia colocaba y recolocaba los cojines de manera compulsiva. Dudley estaba hundido en un sillón,con las manos de cerdito puestas debajo de él y agarrándose firmemente la rabadilla.

Pero llegaron las cinco en punto... y pasaron. Vernon, sudando ligeramente dentro de su traje, abrió la puerta de la calle, escudriñó a un lado y a otro, y volvió a meter la cabeza en la casa.

—¡Se retrasan! —le gruñó a Harry.

—No me digas —murmuró Harry

Las cinco y diez... las cinco y cuarto... Harry la verdad no estaba preocupado ya que sabía que los Weasley llegarian de una forma u otra.

A las cinco y media oyó a Vernon y a Petunia murmurando en la sala de estar.

—No tienen consideración—

—Podríamos haber tenido un compromiso—

—Tal vez creen que llegando tarde los invitaremos a cenar—

—Ni soñarlo —Harry lo oyó ponerse en pie y caminar nerviosamente por la sala—Recogerán al chico y se irán. No se entretendrán. Eso... si es que vienen. A lo mejor se han confundido de día. Me atrevería a decir que la gente de su clase no le da mucha importancia a la puntualidad. O bien es que en vez de coche tienen una cafetera que se les ha ave...—

—¡Ahhhhhhhhhhhhh!—

Harry se sobresaltó al oír un grito y lo unico que penso fue: ¿Porque siento que me voy a meter un problema antes de dirigirse a hacia la sala




𝘛𝘩𝘦 𝘚𝘦𝘳𝘱𝘦𝘯𝘵 𝘪𝘯 𝘓𝘪𝘰𝘯'𝘴 𝘋𝘪𝘴𝘨𝘶𝘪𝘴𝘦Donde viven las historias. Descúbrelo ahora