Comandante Wang

Capítulo 15; Fragmentado

Wang Yibo despertó sobresaltado, todo el cuerpo le dolía, sentía ardor por las quemaduras, pero estaba bien.

Tenía una intravenosa, pero notó a alguien dormido a su costado, durmiendo suavemente sobre la camilla, era Wei Ying, tan solo con verlo su corazón se llenó de tranquilidad, acercando su mano para poder tocarlo, quería estrechar su mano, abrazarlo y nunca soltarlo, pero cuando acercó su mano de manera sigilosa, alguien abrió la puerta de manera brusca.

Despertando a su enamorado de golpe.

—¿Cómo esta comandante Wang? — era el coronel, Wei Ying no dijo nada, no le devolvió la mirada, simplemente se puso de pie con pereza, rascándose los ojos con cansancio y saliendo de la habitación.

Yibo no vio al general en ningún momento, observó como Wei Ying se iba hasta que se perdió de su vista. El coronel notó todo esto. Al igual que muchos conocidos más, que cuando entraron vieron como Wei Ying se iba con indiferencia, como que no estuviera allí pendiente de él y preocupado.

—Veo que ya tiene ganas de continuar con su rutina. — Le dijo uno de sus soldados.

—¿Qué pasó? — hasta que habló fue que se percató que se sentía sordo.

—Es un resumen bastante grande, te calló una bomba, estabas gravemente herido, no sé qué hizo Wei Ying pero aquí está todavía. — le informó el coronel con algo de curiosidad en sus palabras.

—Llámenle, no dejen que se vaya. — Todos se quedaron viendo con mirada de complicidad.

—Estuvo aquí durante 3 días sin moverse, ¿podrías dejar tú que al menos desayune después de 3 días?

—Mejor explícanos que fue lo que sucedió.

Wei Ying sentía tranquilidad, estaba desayunando, lo que en esa época si tenían era comida con muchas especias, con enorme cantidad de diferentes tipos de picantes, y ahora le agradaba que Lan Zhan pudiera comer todo eso y hasta puedan tomar juntos.

Pero cuando pensaba en eso, su sonrisa se desvanecía, no sabía que era lo que quería hablarle, quizás pedirle perdón por ser tan indiferente. Wei Ying no era tonto, sabía que era un arma, y el único que podía sacarle provecho de una u otra manera era Yibo, por lo que se disculparía por tratarlo así aunque le desagradaba.

Desde que despertó solo dejaba de sentir frio en su corazón cuando estaba con Yibo, ya que todo lo que conocía se había ido, las personas que conocía, su familia, las costumbres, todo se había perdido.

El mundo avanzó y el aun esta atascado en el pasado. Lan Zhan había robado para siempre su corazón, incluso el ya no estaba, pero aunque Yibo solo compartiera la misma alma, había prometido protegerlo, estar a su lado siempre aunque le desagradara, aunque se case y tenga una familia con otra persona.

Le dolía pero lo aceptaba.

Cuando terminó de desayunar iba a decirle al coronel si podía irse, al fin y al cabo la misión la había cumplido con éxito.

Quería ver a Yibo pero se regañó mentalmente, aceptaría cualquier disculpa de todos modos, no podía rechazar nada de lo que le pedía.

—Disculpe coronel ¿puedo irme? Si sucede cualquier cosa... — dijo asomando la cabeza por la puerta del despacho.

—A-Ying, Yibo quiero hablar contigo.

—¿Puedo irme? — repitió con indiferencia. — No se preocupe no estoy enojado con él, no es culpa de nadie no agradarle, ¿puedo irme? Si me llama para cualquier otra cosa volveré.