Historias y One-Shot de Jon Snow

Capitulo 90 : Deshaciéndose

Sus tacones resonaron en el suelo de piedra pulida del Hotel Hightower cuando atravesó el vestíbulo y se dirigió al salón. Se cambió en la oficina, cambiando sus pantalones por una falda corta negra oscura y una blusa.

Ella está celebrando esta noche. Su divorcio finalizó esta tarde y está oficialmente soltera nuevamente, aunque había estado sola durante más de un año y sola durante mucho más tiempo que eso. Así que esta noche se va a beber uno o tres martinis en el hotel más lujoso de la ciudad, elegirá al chico más atractivo del bar y celebrará su libertad.

Pidió su bebida, un martini con vodka y limón cuando escuchó a una mujer jadear, empujando a otra mujer en el hombro para notar algo. Intrigada, movió el rabillo del ojo hacia la dirección que señalaban esas mujeres y observó a un hombre con un traje oscuro.

Esperó un segundo antes de volverse para mirarlo correctamente y ¡oh, vaya! Sus ojos literalmente se cayeron mientras lo miraba de pies a cabeza. Mientras Margaery miraba al extraño con los ojos, lo vio moverse en su cabeza y la miró a los ojos. Y sus ojos... sus ojos estaban tan oscuros bajo las luces del bar y eso envió su mente y otras partes a toda marcha.

Apartó bruscamente los ojos de él y tomó un sorbo de su bebida para calmar sus nervios. Fresco y crujiente, se deslizó sobre su lengua. Cítrico brillante con un fuerte golpe de calor en la parte posterior de la garganta. Después de terminar su bebida, lo miró y notó que le estaba hablando algo al cantinero.

Cuando se giró hacia un lado y cruzó las piernas, sintió su mirada sobre ella. Sus ojos se posaron en su rostro y ella sonrió después de unos segundos, lenta y complacida consigo misma. Encantado con el. Esta era la razón por la que ella estaba aquí. Para celebrar su divorcio y acababa de encontrar al hombre adecuado. Levantó una ceja. Una pregunta no formulada.

Sí, por favor, dijo ella con un leve asentimiento.

Tomando otro sorbo de la bebida, lo observó cruzar el mostrador para unirse a ella. De cerca se veía atractivo de una manera casi imposible. Rostro melancólico, ojos misteriosos y sus labios se veían suaves y llenos, su mandíbula era dura. No es un hombre grande, pero su mera presencia era autoritaria y abrumadora. Su piel estaba tan pálida como si nunca hubiera salido al sol. Tenía el cabello rizado oscuro y delicioso en la parte superior de su cabeza y una barba corta y oscura. Margaery podía percibir el contorno de sus músculos firmes y ondulados debajo de toda su ropa.

"¿Estas esperando a alguien?" Su voz es profunda y suave. Coincidió con él.

Ella le dedicó una sonrisa suave y sensual que se sintió sorprendentemente natural. "Quizás."

"Soy Jon", dijo bebiendo su whisky posiblemente de la manera más sexy posible.

Ella extendió su mano. "Encantado de conocerte, Jon."

"Y tú eres..." Él le dio un pequeño apretón a su mano mientras la soltaba, su pulgar arrastrándose por su dedo índice.

"Margary".

Sus párpados cayeron un poco mientras se metía el labio inferior entre los dientes. Él le dio una evaluación de arriba a abajo, que en cualquier otra noche ella habría encontrado súper espeluznante. O al menos, de cualquier otro hombre. Pero tiene esta mirada sobre él, una familiaridad y amabilidad, tal vez. Excepto por la forma en que él la miraba no era amable. Hace calor y está sucio. O tal vez ella está viendo cosas. Habían pasado mucho más de diecisiete meses desde que tuvo sexo y mucho más desde que tuvo uno satisfactorio. Ella presionó sus muslos juntos. Quería sentir ese golpe eléctrico justo entre sus piernas. En su trasero. A través de sus pezones.

"No estás casado, ¿verdad?"

"¿Realmente importa?", preguntó ella bebiendo su martini y desafiando a Jon con la mirada.