Advertencia: incluye contenido +21
Jennie amaba que Lisa la tomará en su regazo, sus abrazos estaban llenos de mimos, caricias y algunas veces, sí tenía suerte, había besos en su cabeza o mejilla.
El vuelo fue bastante cómodo para ambas, las personas que las veían juraban que eran pareja y unos admiraban que fuesen lindas entre ellas, otros sólo se disgustaban de ver a dos mujeres de forma romántica.
Tomaron el vuelo a las 7am; así que llegarían a su destino a 7pm, un vuelo de 12 horas de Corea del Sur a Nueva Zelanda; era demasiado cansado para la coreana estar mucho tiempo sentada en un lugar, pero estaba bien porque Lisa estaba a su lado.
Los ojos de Jennie se abrieron con lentitud, estiró su cuerpo perezosamente y respiró el rico perfume de Lisa, su rostro expresó una sonrisa de satisfacción.
— ¿Dormiste bien, Nini?— ¿Qué mejor despertar con Lisa abrazándola?
— La verdad que sí. Eres más cómoda que una almohada Lili, me encanta que me abraces.
Lisa sonrió y besó su frente.
— Ya casence — bromeó Jisoo desde adelante.
— ¿Quieres casarte conmigo Nini?
Jennie asintió riendo divertida y escondió su rostro en el cuello de Lisa causándole cosquillas.
— Dame el anillo Lili, y me casaré contigo ahora mismo.
— Esa es mi chica — Lisa la abrazó más fuerte sin asfixiarle — conseguiré ese anillo, eh.
— Jisoo pagará los gastos de la boda — Jisoo se negó ante la declaración de Jennie, tanto la rubia como la coreana rieron divertidas de la coreana mayor.
Durante el vuelo comieron lo que la azafata les ofreció, miraron películas y disfrutaron de todo el día juntas hasta que se convirtió en tarde.
Mientras Jennie y Lisa miraban su película favorita; Jisoo y Roseanne compartían besos y caricias un poco subidas de tono, nadie las notaba porque todos miraban sus pantallas, aparte, al ser un vuelo de primera clase, tenían un poco de privacidad.
Al llegar a cielo neozelandés, se colocaron sus cinturones y esperaron las indicaciones del piloto y de la azafata.
— Sufriremos turbulencias al descender, únicamente les pido que tomen su lugar y abrochen sus cinturones — la azafata y su equipo tomaron asiento.
Todos en el vuelo acataron las indicaciones de las autoridades aéreos y se colocaron sus cinturones procediendo a sacudirse levemente por las turbulencias.
Un par de minutos más el avión comenzaba a tocar la pista de aterrizaje. Qué alivio llegar bien.
Cuando se detuvo, las aeromozas guiaron a los pasajeros a bajar ordenadamente diciendo "Gracias por volar con "Korean Air".
Bajaron con cuidado y se adentraron al aeropuerto por el camino de salida.
Jisoo y Rosé habían ido juntas al baño del aeropuerto, esperarían a verse juntas en las gran salida del aeropuerto.
— Fue un largo vuelo — Jennie tomaba su maleta, Lisa ya tenía la suya. Desearía ir a dormir en cuanto lleguemos.
— Sí, doce horas no son fáciles — comentó la rubia — ¿Quieres ayuda con tu maleta?
— ¿No estás muy cansada?
— Estoy estoy bien Jen, sé que estás cansada, te ves agotada.
— Me encantaría tu ayuda, pero no quiero ser abusiva.
— Está bien, me encantaría un masaje cuando lleguemos a tu casa.
— Está bien, te daré un masaje llegando a casa — Lisa sonrió por ello y ayudó a la coreana con su maleta.
Caminaron juntas, Lisa arrastrando su maleta y Jennie abrazada de su fuerte y delgado brazo.
— Es un día bastante frío.
— Es algo normal cuando el invierno llega.
— Supongo que te gusta — comentó Lisa.
— Pues, me guste o no, es un clima al que estoy acostumbrada, de niña solía había climas fríos y lluviosos cuando llegaba la navidad, es lindo, me trae recuerdos.
