La chica vestida de blanco y cabello rubio sintió el calor subir por su cuerpo, también un grito desgarrador querer salir de su garganta, pero, en cuestión de segundos dejo de sentir ese calor desesperante para sentir una brisa suave envolverla.
— ¿Cómo lograste subir? —Pregunta una voz sorprendida y rasposa desde algún lugar.
—Comencé a creer.
— ¿Nunca es tarde para creer?
—No...
Alcanzo a contestar antes de seguir subiendo.
ESTÁS LEYENDO
Microrrelatos: sueños perdidos©.
RastgeleCOMPLETO. El libro consta de varios micrrorelatos de todo tipo, donde algunos tienen su final como otros buscan que el propio lector busque el final que más quieran para ese relato, se encontraran todo tipo de género en estos relatos, como también v...
