Capítulo anterior:
Aquella noche no fue diferente, la observó por unos minutos y se acostó. Pero una hora después escuchó un ruido proveniente de la ventana. Se sentó en el lecho y miró hacia el lugar. Caminó hacia ventana y se aseguró de que no haya pasado nada. La cerró y volvió a acostarse. No notó que un par de ojos lo observaban del otro lado de la ventana...
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Cuando se acostó, volvió a escuchar un sonido proveniente de la ventana. Al voltear vio una figura arrodillada en la ventana mientras intentaba abrirla. Un terror se esparció por su cuerpo y corrió hacia su Guqin. Se acercó con cautela hacia la ventana, pero al notar quien era, bajó su Guqin con un resoplido:
- ¿Qué haces aquí?
- Ábreme –pidió el Wen del otro lado.
El Lan aun resoplando abrió la ventana y dejó pasar al Wen.
- Insisto ¿Qué haces aquí? –preguntó con los brazos cruzados
- ¿Leíste mi carta?
- Sí –respondió con duda
- ¿Para qué me preguntas?–dijo mientras limpiaba sus túnicas- Ahora sí –abrazó al Lan ya que ahora sus túnicas estaban limpias. Este se dejó abrazar por unos segundos luego lo empujó:
- Te van a descubrir, ya vete
- No me interesa –respondió mientras intentaba acercarse al menor con la intención de abrazarlo.
- Pues a mí sí, vete –contraatacó mientras escapaba de sus brazos. Un puchero apareció en el rostro del Wen, que desde el punto del Lan, lo hacía ver como un cachorro tonto.
- Nadie me verá y tendrás que acostumbrarte, porque vendré todas las noches a hacerte compañía –se cruzó de brazos con el ceño fruncido.
Una sonrisa se escapó del rostro, una sonrisa que logró ver el Wen. Quizás si quería que se quedara. El mayor caminó hacia él y sonrió:
- No sabes disimular, Renren
- Ya cállate –murmuró algo sonrojado haciendo reír al contrario.
- Suficiente, debes irte –lo empujó hacia la ventana. Si alguien lo veía estaría en problemas.
Wen Ruohan volteó y besó al Lan en los labios, descolocando al contrario por completo. Río al ver su reacción. Lan Qiren se sonrojó hasta las orejas y murmuró "creído".
- Te veo mañana, Renren –dejó un corto beso en sus labios- No me extrañes.
- Idiota –murmuró sonrojado.
Cerró la ventana y volvió a dormir, ahora con el estómago lleno de mariposas.
De esa manera transcurrieron las semanas, todas las noches el de túnicas rojas visitaba al de túnicas blancas. Compartían su día con el otro, normalmente hablaba el Wen porque el Lan no hacía mucho allí dentro, pero no le molestaba, le gustaba escuchar hablar a su pareja.
Una noche cálida ambos estaban en el balcón mirando la luna...
- Debería irme... -murmuró el Wen sin moverse
- Mhn –"respondió" el Lan con los ojos cerrados, descansando su cabeza en el hombro de su pareja.
Wen Ruohan acarició sus cabellos para luego besarlos.
- Renren –llamó
- ¿Qué quieres? –gruñó
El mayor soltó una risa. "Y pensar que al principio me echabas"
- Debo irme –besó su mejilla.
Un sonido parecido a un gruñido provino del Lan, antes de levantarse y besarlo.
- Nos vemos... - murmuró antes de alejarse
- No me extrañes, mi vida –bromeó
El Lan rodó los ojos y habló:
- Ya vete
Con una sonrisa el Wen saltó desde el balcón. El Lan sonrió y entró a la habitación para dormir.
Cuando Wen Ruohan llegó al suelo sintió algo extraño en su boca.
- ¿Un hechizo silenciador? –pensó extrañado
Volteó hacia el balcón para ver si su pareja fue el causante, él no estaba allí. Cuando intentó ponerse en guardia sintió un golpe en el cuello y cayó al suelo desplomado. No pudo ver el rostro del causante, pero si sus túnicas.
- Es un Lan –pensó antes de desmayarse por completo.
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Buenas, gente hermosx!
Disculpen si es algo corto, seguiré escribiendo mañana.
¿Quién habrá desmayado a Wen Ruohan?
Lo sabremos luego.
Saludos
Gu_Miyoung_07
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Te has enamorado, Lan Qiren? -Ruoren
RomansNo podía ser cierto Maldito recuerdo Maldito Wen Maldito Clan Y... Maldito Deja Vu