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1 año después.

Narra Antonia.

Estaba en mi computador escuchando los bunkers, específicamente, quien fuera, mientras leía antes de diciembre de joana marcus cuando entro el Jose a mi pieza.

— Te traje un frapuccino —dice el Jose mientras me extiende el vaso de dunkins.

— Gracias —le sonrió y lo recibo.

— Sabes que aun puedes cambiar de
opinión —dice y yo ruedo los ojos.

Ya va a empezar.

— Jose no voy a cambiar de opinión, ademas si vuelvo a ese liceo voy a estar sola —lo miro.

El suspira y se sienta en mi cama.

— ¿en este nuevo no estarás sola?

— El lucas y la cami están ahí —sonrió —. estaré bien, confiá en mi.

— Se que lo dices para que no me preocupe, pero ahora mismo es difícil confiar en ti después de este ultimo año.

— Jose no empieces —le advierto.

— Después de que la vero —lo interrumpo ya arta.

— ¿Para que la nombras?

— ¿aun no la superas? ¿No vas a terapia para eso?

— ANDATE AHORA.

El se para y antes de que diga algo mas mi mamá aparece en la pieza bastante seria.

— Jose, ve a tu pieza.

El sale enojado y mi mamá me mira con una pequeña sonrisa.

Cambiara de tema...

— ¿Te gusto? —apunta el libro y yo asiento —. que bueno —sonríe —. estoy preparando la once con el alonso para que bajes en un rato.

— Okis —antes de irse me tira un beso y cierra la puerta.

Este ultimo año pasaron demasiadas cosas y una de ella fue que la relación con el Jose se rompió mucho, hay veces que tenemos buena comunicación, alguno dice algo y se arruina todo, según el se esfuerza para recuperarme pero lo único que hace es gritarme a la cara estas dos palabras, verónica y terapia.

Mi mamá al notar eso siempre interviene antes de empezar con los gritos y intenta evitar que discutamos tanto.

Después de la muerte de la valentina y la despedida de la vero no he sabido nada de ella ni de su familia. sinceramente si me dolió e hizo bastante daño separarme de ella, mas cortar por completo la comunicación por elección de ella, llegue a un punto donde caí en una depresión muy grande y comencé a hacer cosas que no debía.

Gracias a la ayuda de mi mamá y padrastro pude salir de ese agujero, ademas que mis citas con mi psicóloga también han ayudado en gran parte.

Me levante de la cama, tome el vaso con el frapuccino y me dirigí a mi baño personal, bote el contenido en el
inodoro, tire la cadena y bote el baso en el tacho de basura.

Regrese a mi pieza y seguí en lo que estaba hasta que mi mamá me llamo.

Baje las escaleras y fui al comedor donde estaba el alonso (la pareja de mi mamá) y mi mamá, me senté al lado de ella y comencé a hacerme un café.

— ¿Mañana irán a ver el liceo nuevo? —pregunta el alonso.

— Vamos a ver que tal es, por lo que he escuchado es uno de los mas buenos de la zona.

— Esperemos que sea así, ¿tienes amigos ahí? —me mira y yo asiento.

— Esta el lucas en el 3ero b y la cami esta en el c.

weona, te quiero caletaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora