𝕯𝖆𝖗𝖐 𝕾𝖔𝖚𝖑𝖘 - 𝕰𝖑 𝕯𝖊𝖘𝖙𝖎𝖓𝖔 𝖉𝖊𝖑 𝕮𝖆𝖒𝖎𝖓𝖆𝖓𝖙𝖊

Capítulo XVI

El Rey sin Nombre observa a su padre, sabe que si acaba con su vida todos los demás caballeros perderán sus esperanzas, además obtendrá su Alma y así no tendrán más opción que someterse ante él.

Sin notarlo y perdido en sus pensamientos no logra ver a Gough, este lo está mirando fijamente y comienza a apuntarle con una gran flecha, esta impacta en el Rey de las Tormentas, provocando que deba aterrizar forzosamente, de esta forma Artorias se lanza rápidamente a por el Rey sin Nombre, estuvo cerca de lograr un golpe crítico pero este reaccionó a tiempo y lo desvío, así Sif aparece por su espalda y lanza un fuerte golpe que también es repelido.

Tantos movimientos bruscos lo hacen pensar, ¿Qué rayos intentan? De esta forma entre el polvo un amigo aparece, un compañero, Ornstrein se abalanza sobre el que alguna vez lo llamó amigo, pero de igual forma sus lanzas chocan, sus voluntades chocan.

Rey sin Nombre: Ornstrein, sigues tan tonto como siempre, ¿aún crees en mí padre?

Ornstrein: Tú... No tienes idea de lo que haces, los Dragones te lavaron el cerebro, te haré entrar en razón, ¡¡aún si tengo que romper cada uno de tus huesos!!

El Rey sin Nombre dio un suspiro y de esta forma el Rey de las Tormentas emprende vuelo y seguido de esto su jinete lanza un fuerte golpe contra el suelo, esto hace temblar toda tierra en cuestión, una tierra que deja a su paso escombros, que deja las esperanzas de su amigo de poder salvarlo, de esta forma Ornstrein comprende que la única manera de solucionar esto, es acabando con el que algún vez, fue su amigo.

Artorias: ¡Capitán! ¿Se encuentra bien?

Ornstrein: te mataré...

Artorias: ¿Capitán?

Ornstrein: No dejaré que esto continúe, aún si debo hacerlo con mis propias manos.

Así Ornstrein recogió su lanza y corrió en dirección al Rey sin Nombre, decidido a terminar con esto, seguido de Artorias el cual se dio cuenta que Ciaran estaba rodeada por varios Dragones, en ese momento debía elegir, ayudar a su capitán o a Ciaran, la respuesta no tardó en llegar, y de un salto atravesó la cabeza de uno de los Dragones Eternos.

Artorias: ¿Estas bien?

Ciaran: Ahora sí.

Artorias: Bueno, dejémoslo así, déjame a los cuatro de la derecha.

Ciaran: Yo con el grande de atrás.

Sif: ¡Ruf!

Artorias: Al parecer tú quieres uno también, hahahaha... Esto será divertido.

Así la batalla comienza, Artorias pega el primer golpe, dando una fuerte estocada que atraviesa a uno de los Dragones, seguido lanza su Espadón hacia atrás y Ciaran lo utiliza de pivote para saltar sobre los Dragones y llegar hasta su objetivo, Sif hace lo mismo pero utilizando el escudo de su compañero, así Artorias logra cargar toda su fuerza y pega un fuerte golpe que atraviesa a uno de lo Dragones desde la cabeza hasta su estómago, Sif utiliza su espada para rotar y así cortar el cuello de uno de los Dragones, y Ciaran apuñala al grande en su pecho, el combate se veía sencillo pero no esperaban la intromisión de un Boquiabierto, este embiste a los Caballeros, aunque lo logran esquivar ven como los otros Dragones son devorados por el Boquiabierto, quedan impresionados, no sabían porque este se comía a los suyos, la explicación era sencilla, el Dragón Boquiabierto solo se limita a comer para sobrevivir, y solo siguen las órdenes de Kalamet.