Alone (Scorpius Malfoy) Traidora Temp 2

Capítulo 6

Alice:

Los días soleados que le continuaron a aquel día fueron como una broma sin gracia, odiaba los días cálidos, todos aprovechaban para pasar las tardes sentados bajo un árbol mientras merendaban en grupo. Pero la emoción les duró bastante poco, estábamos en invierno y eso significaba que en cualquier momento habrían ventiscas, caería nieve y el lago negro se congelaría... y eso significaba que podría volver a dedicarme a pasarme las tardes envuelta en una manta mientas observaba caer la nieve recostada contra una ventana desde uno de los descansillos del séptimo piso.

-   La nieve se ve mejor desde fuera - dijo una voz detrás de mi

No le respondí, lo mejor era ignorarlo para que se marchara.

-   Sé hacer un hechizo con el que puedo darle la forma que quiera a un copo de nieve, te encantará - siguió hablando y volví a quedar en silencio - ... Vale, no quieres hablarme, lo entiendo... solo que quiero disculparme

Eso me hizo desviar la vista de la ventana.

-   Bien, estás disculpado - respondí - Ya puedes irte

-   Supongo que me lo merezco - dijo y lo sentí acercarse por mi espalda - Sé que estás harta que venga y te pida perdón, que diga que no volverá a pasar y que luego tenga que regresar para decir las mismas palabras que para ti ya parecen vacías pero te prometo que...

-   Que esta vez es diferente - completé por él - Pues sí, Scorpius, esas palabras están muy vacías - lo encaré - No prometas cosas que no eres capaz de cumplir solo para aliviar tu conciencia y poder decirle a los demás que eres una grandísima persona... estoy harta que todos digan lo mismo

-   Sabes que no lo hago por eso - se hizo el ofendido

-   Pues no lo sé, mi madre dice que debería poner de mi parte, que es mi culpa que tú tengas otros amigos, que con mi carácter de mierda eso se veía venir - el negó con su cabeza - pero no estoy de acuerdo, creo que he puesto mucho de mi parte para que mis padres ni los tuyos te bajen del pedestal...

-   Lo sé... sé que mi madre no está de acuerdo con mis amistades, sé que los has defendido sin conocerlos... pero ese no es el tema... esta vez no voy a hablar y decir las mismas palabras, esta vez te voy a demostrar que voy en serio

-   ¿Ah sí? ¿Y que harás para demostrarlo? - pregunté con burla

Èl me observo con sus penetrantes ojos tormenta y rebuscó en uno de los bolsillos de su pantalón hasta que sacó un pergamino perfectamente doblado.

-   ¿Recuerdas que es esto? - preguntó

-   Sí - respondí escuetamente

-   Creo que es hora de cumplir todo los puntos de esta lista - dijo con una sonrisa

-   Creo que estamos demasiado grandes para eso, ya no tenemos 11 años - lo esquivé y caminé hacia la escalera

-   Eso no es importante - dijo agarrándome del brazo

-   Quiero irme a la sálale común... si me permites - dije forcejeando para que me soltara

-   No, no te lo permito - me jaló hasta que choque contra su pecho

Me agarré de su túnica, estábamos demasiado cerca y eso provocó que mis mejillas obtuvieran un tono rojizo, su perfume inundaba mis fosas nasales, ese olor a libros viejos ligado con perfume caro me atontaba. No hay olor que más me guste que el de un buen libro antiguo, ese que tiene sus páginas amarillentas por el paso de los años.

Me acercó aún más, y sé que debía alejarlo pero siempre había deseado tanto estar así de cerca que no podía destruir el momento y él sonrió al notar que no tenía intención de separarme.