Capítulo 5

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Alice:

- Alice - escuché que me llamaban a mi espalda

Era él, su voz estaba grabada en mi memoria, mis manos temblaron alrededor del libro que había tomado de la estantería, respiré ondo y volteé.

- Hola - dije sin mirar a sus ojos, a sus profundos ojos grises, esos que me recordaban los mejores días de mi corta vida, eso que por considerarlos rutina no aproveché lo suficiente

Durante estos años, observando a todos a mi alrededor desde el rincón más solitario del colegio aprendí bastante de ciertos temas. Es sorprendente lo mucho que puedes comprender a las personas con solo observarlas, más aún cuando no tienes a nadie con quien hablar.

Entre todas las experiencias ajenas que estudie hay un tema en específico que aún me es imposible comprender del todo, creo que pasarán siglos y será algo que ni los magos aún llegaremos a controlar: el amor. 

Quizás, el sentimiento más reconocido.

Todos a lo largo de su vida han dicho amar a alguien: a sus padres, abuelos, hermanos, amigos o... parejas.

Hay amores que se consagran en los momentos difíciles, en esos en los que te tienden la mano cuando sientes que estás a punto de caer por un abismo. También está ese amor puro, verdadero, el primero, el que te enseña a querer, te ilusiona y parece el guion de un libro romántico. Otros van más por lo carnal, el amor pasional que te nubla el juicio, después está el amor a primera vista, donde todos dicen sentir mariposas pero más bien sientes que vaciarás el estomago en cualquier momento, luego está el amor platónico que te hace soñar con un mundo perfecto, donde todo es fantasía. Pero, ¿es posible que una sola persona represente todos estos tipos de amor?

La respuesta: Sí.

Y, ¿es posible enamorarse de esa persona sin importar que te preste la misma atención que un adolescente rebelde a sus padres?

Pues sí

¿La prueba?

Está justamente delante de mí.

Porque al final mi madre tenía razón cuando me repetía una y otra vez aquella frase: "Solo cuando esa persona se aleja es que comprendes la magnitud de la fuerza con que la amas"

-   "Los juicios de Salem" - dijo con una sonrisa de medio lado

-  ¿Qué?

Lo miré extrañada.

-   El libro - dijo señalando a mis manos

-    Ah, sí - estaba muy nerviosa pero tengo que esforzarme en dar respuestas coherentes

-   Siempre te han gustado los libros

Es cierto.

-   Es una de las cosas que teníamos en común - ¿Por qué dije eso? Él enarcó una ceja divertido - Ya sabes... ¿como distraer a Scorpius Malfoy de temas emocionalmente peliagudos?... solo había que llevarlo a una biblioteca

El asintió con una sonrisa, mientras que yo tenía las mejillas más rojas que un tomate.

-   Es cierto... la lectura aún es una de mis actividades favoritas - me aclaró

-   Para mi es difícil saberlo, es la primera vez que intentas entablar una conversación conmigo en mucho tiempo

Vi como su rostro se congestionó como si le hubiera acertado un golpe en la cara.

-   Tú tampoco es que te hayas esforzado en cambiar eso - respondió con enojo

-   Yo no tenía que hacer nada, Scorpius... yo no fui quien se alejó - contraataqué obviando el sudor en mis manos - Yo siempre he estado aquí - dije señalando a nuestro alrededor con una de mis manos - Tú, en cambio, eres el más popular de Slytherin, todos los chicos quieren ser tus amigos y las chicas hacen cola por tener tu atención por solo unos  minutos... lamento que esperaras que yo fuera una de ellas

Alone (Scorpius Malfoy) Traidora Temp 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora