Aunque prefería mil veces vivir a morir de una manera injusta, no sabía si dejar de respirar era mejor que seguir las reglas del guión
-nunca eh sido buena para seguir las reglas-miro con superioridad al cielo- así que no pidas que haga cosas que no...
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Capítulo 2: la sombra.
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Después de haber huido agilmente de su gran torpeza, por fin había llegado a su salón, pero, algo se le había olvidado por todo el camino y ese detalle estalló en su cabeza al ver a la pelicorto sentada en su salón, completamente quieta. Lia estaba en la misma clase que dan oh, por lo tanto no era necesario haberla estado persiguiendo todo el tiempo, si no hubiera hecho eso, tal vez no habría roto el saco del chico más odioso de esa institución.
Definitivamente ella se creaba todos los problemas con su simple pero ágil torpeza.
-por qué la vida es tan difícil.. -susurraba, aún parada en la entrada del salón.
-tal vez.. por qué gente como tu existe.
Lia volteo hacia atrás viendo al chico que no quería ver en ese momento, oh nam joo.
Tan pronto lo reconoció dio pequeños pasos hacia atrás con la cabeza agachada, esperando no ser reconocida.
El alto, una vez más, la miró; parecía que se quería esconderse bajo su cabello, eso le parecía un poco tierno, no era de su estilo, así que no causaba suavizar su actitud con esa tierna acción.
Oh nam joo se quito su saco, que aún estaba roto y lo aventó a la cabeza gacha de la castaña.
-tienes que reparar o comprarme otro saco-oh nam joo la miró, al parecer iba en su salón pero ni siquiera la reconocía -¿Cual era tu nombre? -tal vez pensó que era nueva o simplemente era alguien que no llamaba la atención dentro del aula y por ese motivo la desconocía.
Lia se quito el saco de la cabeza y con algo de timidez respondió-no creo que si te lo diga, puedas recordar después.
Oh nam joo sonrió ladino por esa respuesta, una cosa era que no se llevaba con todos sus compañeros y otra muy diferente que no se supiera los nombres de ellos. Bueno, ella era la excepción.
-como sea, solo lo quiero como nuevo, realmente no es necesario saber tu nombre.
Oh nam joo sin esperar ninguna respuesta entro al salón de clases y se sentó en su escritorio, mientras lia solo miraba aquel chaleco. Realmente no pensaba arreglarlo y es que sabía que con el cambio de escena todo volvería a la normalidad y el ya ni siquiera la recordaría...
