Aunque prefería mil veces vivir a morir de una manera injusta, no sabía si dejar de respirar era mejor que seguir las reglas del guión
-nunca eh sido buena para seguir las reglas-miro con superioridad al cielo- así que no pidas que haga cosas que no...
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"El comienzó de la desgracia"
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Lia no sabía cómo responder aquello, ella se había deslindando totalmente de componer el saco del chico, ni siquiera esperaba entablar alguna conversacion con el, de nuevo.
Oh nam joo podia ver el rostro de la chica, sus expresiones eran tan claras que incluso sabía lo que pensaba.
-acaso tu..no pensabas devolverlo- oh nam joo sonrió de lado y dejo salir una pequeña risa
- WOW...tu realmente eres, única.
Lia negó varias veces algo nerviosa.
— no, no, no. Es solo que — la chica necesitaba inventar una excusa rápidamente- estuve muy ocupada estos días y..bueno, se me olvidó.
Oh nam joo soltó el brazo de la chica y asintió con una sonrisa satisfactoria
- supongo que es razonable, te creeré, por ahora..pero si no la devuelves yo-
lia escuchaba atentamente cada palabra del chico, tenía que aceptar algo. Era guapo. Y de repente sus ojos empezaron a detallar cada parte de el rostro contrario sin percatarse de lo que decia, justo cuándo sus pensamientos la estaban llevando a otro rumbo la puerta se abrió abruptamente, dejando ver a dan oh la chica que tanto estaba buscando.
La pelicorto parecía estar discutiendo con ella misma, y es que después de ese incidente en la biblioteca paso algo completamente extraño en el baño. Ella nunca se metía en problemas de otros, pero hoy cuando yeo juda parecía estar siendo intimidada la consoló e incluso le ayudo a limpiarse con toallitas húmedas que ella nunca había tomado.
Cosas extrañas le estaban pasando, pero ante sus ojos paso algo más extraño aún.
Dan oh miro a los dos chicos con sorpresa, oh nam joo no solía hablar con chicas a solas y a lia (su amiga de hace unos días) ni siquiera la había visto hablar o mirar al alto ni por error, ciertamente era extraño, parecía que estaba interrumpiendo algo..
