Episodio 7

23.5K 1.8K 666
                                    


(Narra Kyouya)

 

Estaba  mareado y no sabía bien lo que estaba pasando. No estaba seguro de  que me había pasado o que había provocado este placentero sopor pero quería más, había un gran calor en mis mejillas y mis orejas. No sentía las manos y mis piernas temblaban. Dentro de aquella nube de placer escuche una sonido constante que no supe identificar y de repente esa adictiva sensación se detuvo.

Mis piernas flaquearon y caí de rodillas al suelo, lo siguiente que identifique fue un tono de voz desconocido, gire mi cabeza hacia lo que parecía la entrada a la habitación, pero sin mis gafas me era imposible distinguir a los dueños de las dos siluetas que se hallaban en la puerta, pero que no pudiera ver bien no significaba que no pudiera escuchar.

—Buenos días, mi nombre es Akashi Akiyoshi y soy el encargado de los dormitorios de los chicos—dijo más enérgicamente de lo que me gustaría.

—E-es un placer Akashi, ¿Necesitas algo en especial? Estoy algo ocupado ahora—por alguna razón, esa voz nerviosa me molestaba aún más.

— ¿Algo ocupado? Ahora que lo mencionas, te ves un poco mal. Tu cara esta roja, ¿Quieres que te lleve a la enfermería?

— ¡No gracias! Está bien. No necesito ayuda—me levanté lentamente y me aventuré en búsqueda de mis gafas. Empezaba a recordar cosas, como que estaba en los dormitorios del Instituto. Cuando por fin encontré una mesilla, palpé un poco y encontré el estuche que contenía mis lentes. Lo abrí y me los puse, entonces pude distinguir bien al gusano rojo pero no reconocí a la otra persona.

—Oooh...ya me di cuenta que estas muy ocupado, perdona que no lo haya notado antes, ¿Pero no crees que es un poco temprano para tener sexo con tu compañero de cuarto?—juro que si hubiese estado bebiendo agua la escupiría. ¡¿Qué demonios?! ¡¿Sexo?! ¡¿Con eso?! Me acerqué hacia ambos para intentar salvar mi imagen.

— ¿Qué? ¡No! ¡Claro que no! ¡Estas malentendiendo todo!—exclamó el idiota.

—No tienes que excusarte conmigo. Créeme  que si yo tuviese un compañero de cuarto tan lindo no dudaría en hacerlo. Se le nota en la cara que es un pasivo de primera— ¿Yo? ¿Pasivo?! ¡Pasiva su madre!

— ¡Óyeme! ¡Me estas insultando! Ni en mil años tendría sexo con ese gusano rojo—protesté para proteger mi orgullo.

—Entonces, ¿Te gustaría tenerlo conmigo?—levantó mi rostro con dos dedos de su mano derecha—Tienes una cara muy linda—me dijo y estaba a punto de contestarle algo muy feo cuando sentí su mano desocupada posarse descaradamente sobre mi trasero—Tu. Yo. Solos. Una noche. ¿Qué dices? —escuché la risa de mi estúpido compañero de cuarto y mi furia creció.

Asi que terminé estampando mi puño en el estómago del chico que apenas había conocido hace tres minutos, pero ya odiaba. Después me abalancé sobre el otro idiota y caímos ambos al suelo. Estuve a punto de golpearlo cuando sentí un extraño bulto bajo mi trasero. Me levanté rápidamente y miré hacia su entrepierna para descubrir que estaba excitado.

— ¡T-Tú!—lo señale— ¡Es-Estas...!—no tenía palabras para expresarme en este momento.

Best (Boy)FriendsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora