Capítulo tres.
Al día siguiente Samuel no sabía cómo decirle a su asistente la que había liado, por lo que armandose de valor y soltando el aire que llevaba conteniendo lo llamó para quedar en el centro, por fortuna Rubén aceptó sin hacer preguntas, diciéndole que en media hora estaría allí.
- Entonces, ¿Cómo te fue con Akira? - preguntó Rubén mientras caminaba con Samuel a su lado.
- Bastante bien a decir verdad. - comentó nervioso. - Solo que... Puede ser que me haya inventado otro matrimonio falso y ahora quiera conocer a mi futuro ex esposo. -
- Oh... Ahora entiendo todo. - Rubius lo miró acusadoramente. - Hombre, ¿Entonces yo me tengo que hacer pasar por tu ex esposo y tener que hablar con ella? -
- Ya, no pensé que lo fueras a deducir tan rápido. -
- ¿Pero qué me estás contando? - su cara lucía ofendida.
- ¡Lo lamento! fue lo primero que se me ocurrió para salir de esa situación, por cierto te llamas Auron y me engañaste con un tal Daniel Radcliffe - terminó de contarle.
- Pero bueno, 2IQ Vegetta, ¿No sé te ocurrió un mejor nombre? -
- Lo lamento, casi me hago Auron encima cuando preguntó, me dió pánico. -
- ¿En serio? El mismísimo Samuel De Luque que se inventa matrimonios falsos todos los fines de semana, ¿Entró en pánico? - preguntó con cierta incredulidad. - ¡JA! permíteme dudarlo. -
- ¿Eso no te da una idea de mis sentimientos por ella? Rubius, en serio no quiero arruinar esto. -
- Pero vamos a ver, ya de por sí empezaste mal con solo mentirle, ni siquiera pensaste en que cuando vaya al consultorio a visitarte me va a ver ahí como no solo tu asistente, sino también tu recepcionista. -
- Doblas, no eres solo mi asistente, eres mi amigo. - dijo con sinceridad.
Rubén suspiró ante eso, era evidente que no le gusta ser solo su amigo.
- Ah, casi se me olvida, tenemos que ir a por ropa nueva. - Samuel siguió hablando.
- ¿Qué tiene de malo la mía? - preguntó confundido.
- Nada nada, solo que me gustaría dar la impresión de que tuve un esposo guapo y elegante. - Rub lo miró enfadado. - No me mires así, debes parecer el esposo de un cirujano plástico y tú solo usas sudaderas dos tallas más grande de la tuya. - dijo mientras pasaba una mano sobre el cabello de Rubén. - También deberías cortarte el pelo. -
- Hijo de... - Rubén no supo cómo hizo para contener todos los insultos Samuel merecía ¿Quién se creía como para criticar su forma de vestir y el largo de su cabello? En su opinión sus sudaderas eran la hostia y su pelo estaba bien así, aunque era verdad que debería volverlo a teñir, ya se estaban notando sus raíces castañas.
(...)
Luego de recorrer varias tiendas de ropa Rubius se pudo hacer de un guardarropas totalmente nuevo, nunca pensó tener más de un traje y mucho menos con zapatos de vestir a juego.
El problema estuvo cuando fueron a uno de los mejores estilistas de Madrid, el peluquero no dejaba de criticar su cabello, que si el largo, las puntas abiertas, lo seco y maltratado que estaba, llegó a un punto que se estaba arrepintiendo de haber siquiera pisado ese lugar. Para su suerte el chico hizo una maravilla, ahora su cabello ya no se veía como el de una escoba y Samuel quedó impresionado.
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Un esposo de mentira.
FanfictionEl famoso cirujano plástico Samuel De Luque decide contratar a su asistente y amigo Rubén Doblas un padre soltero con dos hijos, para que finjan ser su familia, luego de conocer a una chica un tanto menor que él. Su intención es demostrarle a Akira...