Mi refugio

42 Jongin

Me bajo de la camioneta, abro la puerta trasera, desabrochó el seguro de la silla para bebés de mi hijo, lo tomó en brazos y le doy un beso en su mejilla.

-¿Listo para ver a mamá?- asiente feliz.

-Si, lo estano- sonrió, acomodo su cabello.

-Yo también lo extraño-

Kyunsoo tomó la decisión de internarse en un hospital psiquiátrico hasta estar lo suficientemente bien, ha sido un mes extremadamente largo en dónde solo nos permitieron venir a verlo 1 vez y solo podía recibir 1 llamada por semana.

El día de la visita vinimos todos a verlo, nunca había visto una sonrisa tan genuina como la que le vi ese día, y sus abrazos estuvieron cargados de amor y ligeros de dolor, pude sentir al verdadero kyungsoo.

-Buenos días- veo a la enfermera sentada en el puesto de información - Hoy dan a mi esposo de alta y vine por él-

-Nini- volteo en directo en la que viene la voz de mi esposo, está parado con un morral en su hombro, su cabello es más largo, está delgado pero se ve sano.

-MAMI- dejo a mi hijo en el suelo y corre hasta donde está mi ángel, se agacha y recibe a nuestro hijos en brazos - Mami te estane-

-Mi cielo, mi bebé yo también te extrañe mucho- puedo ver cómo ambos lloran, trago el nudo en mi garganta y me acerco a ellos, Soo se coloca derecho con mi hijo en brazos y no puedo evitar abrazarlo - También te extrañe mucho- lo abrazo con fuerza y está vez soy yo quien llora - Me nini-

-Mi vida, te extrañe tanto- me separo de él, lo tomó del rostro y lo besó con fuerza, él corresponde mi beso y se sostiene de mi ropa, nos separamos y junto nuestras frentes.

-Te amo-

-Te amo, te amo, los amo- lo veo a los ojos y limpio sus lágrimas mientras él limpia la mías.

-Yo tabie los amo- ambos vemos a nuestro hijo, está llorando, besamos su carita y hago que se pase a mis brazos, sacó el pañuelo de mi traje y lo limpio.

-Sopla- él lo hace y limpio bien su naricita - Te amo mi príncipe- se abraza a mi cuello - ¿Tengo que firmar algo? ¿Hablar con él médico?- guardó el pañuelo en mi bolsillo, tomó la mano de mi esposo y la beso y noto que no está su alianza de matrimonio - ¿Dónde está?- lo veo asustado.

-Respira tranquilo, tengo que ir por las cosas que me quitaron pero debía de esperarte, ven, vamos- me guía por el pasillo - Me hicieron mucha falta, todos los días quería un abrazo de ustedes- suelto su mano y pasó mi brazo por su cuello acercándose a mí, él pasa su brazo por mi cadera y beso su sien.

-También me hiciste mucha falta, siento la casa vacía sin ti, empecé a odiar el silencio desde que no tengo tú voz en cada rincón de la casa- toma mi mano y la besa.

Llegamos a una ventanilla y solo me hace pensar en las estaciones de policía donde a uno le entregan sus pertenencias luego de estar preso.

-Hola, me dieron de alta el día de hoy-

-¿Quién se encargó de tú papeleo para ser internado?-

-Mi esposo- me señala.

-Bien, por favor él señor firma estos papeles, revisen que las cosas que fueron entregadas estén completas- me pasan una tabla y leo todo lo que le quitaron.

-Anillo- veo a mi esposo, ese anillo es lo primordial en esta lista. Él saca algo de la bolsa transparente, se lo coloca y me lo muestra.

-Aqui esta-

-Listo, el resto no es importante -

-¡Nini!- me río y sigo leyendo la lista, todo está completo.

-Listo, está todo perfecto- entrego la tabla con los papeleos firmados - ¿Nos podemos ir?-