En un pueblo victoriano un joven tímido y melancólico llamado Naruto Namikaze, presionado por su adinerada familia, está a punto de comprometerse en un matrimonio por conveniencia con la hija de unos aristócratas. Mientras ensayan la boda, la presió...
No sabía si poner o no las canciones de la película, pero a la final decidí que sí. Al menos, las que considero principales y tienen peso para la historia. La letra de las canciones tendrá uno que otro cambio para ajustarla a los personajes.
Nota: Las canciones estarán centradas y en letra cursiva para saberlas identificar. Los coros estarán de igual forma pero entre paréntesis ( )
Sin más que decir, les dejo el capítulo de este nuevo capítulo.
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Naruto se encontraba acostado en el suelo recobrando de a poco la consciencia pero aun sus ojos no se acostumbraban del todo a la luz, lo único que podía captar eran las voces que escuchaba cerca de él.
- ¿Qué había pasado? - Se preguntaba internamente - ¿Acaso todo fue una pesadilla? -.
El rubio abrió lentamente sus ojos y pudo divisar por fin las figuras borrosas que estaban a su alrededor.
Parpadeo unas cuantas veces más hasta captar la imagen con claridad de un chico seguramente más joven que él, tenía cabellos negros lisos que le llegaban hasta sus hombros, con leves puntas de cabello levantadas hacia atrás y un flequillo que le tapaba parte de su frente, su ropa desgastada era la misma que había visto en el bosque. Pero lo que llamó la atención del Namikaze, eran esos ojos grandes y negros que le observaban con preocupación. Su rostro era realmente hermoso con facciones delicadas, de seguro era un doncel. Su piel era pálida, aun más de lo normal y ... su mejilla izquierda tenía una herida que enseñaba parte de su dentadura.
Esto último fue que alerto a Naruto, por lo que trato de levantarse con rapidez y alejarse, pero el tintineo de una campana y las luces de colores que se encendieron de repente hizo que se quedara quieto.
Empezó a notar como de repente el lugar se llenaba de más personas ... ¿muertas? ... algunas tenían la piel pálida, partes de sus cuerpos parecían que estaban comidos y otros solo eran puros esqueletos.
Sintió como alguien lo levantaba como si fuera un muñeco de trapo, haciendo que quedara de pie y le grito en la cara de manera cantarina:
- ¡Llego otroooo! -Este era un chico de cabellos blanco con un ligero tinte azul y ojos morados, era más bajo que el y además tenía una actitud muy infantil. Aquel tenía parte de su cabeza con piel faltante haciendo que su cráneo se pudiera ver y sucedía lo mismo con sus brazos, pues en estos de igual forma se podía apreciar su esqueleto.
Como si eso no fuera lo peor que Naruto hubiese sufrido en toda su vida, al voltear se encontró nuevamente con el primer chico de cabellos negros pero se llevó el mayor susto cuando uno de sus ojos fue empujado desde el interior, siendo alcanzado a agarrar por su dueño antes de que cayera al suelo y de aquella cavidad vacía que ahora se notaba salió un gusano gris con toques negros.
- A ver déjame inspeccionar un poco - le hablo el gusano en un tono un tanto despreocupado, a lo que el pelinegro rápidamente lo cubrió.
- ¡Ups! Gusanos - dijo a lo que soltaba una risa nerviosa.
