Las hermanas de Iguro

Cap 3

Narra Kohaku

No fue tan difícil esta misión, además me gane un amigo; aunque si mamá estuviera aquí me estaría diciendo que soy un imprudente por traer a un niño conmigo a pesar del peligro. Mientras caminábamos, mi cuervo se acercó a nosotros y graznó haciendo que el niño y yo cubriéramos nuestros oídos; sé que me darán una reprenda pero no quiero que nos deje sordos.

Kohaku: ¡Deja el escándalo! - exclamé haciendo que el cuervo se callará

Jack: No ¿le has puesto nombre? - cuestionó a lo que negué y Jack pareció pensar en algo - te llamaras Kazu

Kazu: Chico lindo - dijo posándose en el hombro del chico y volvió a graznar - misión, misión caw baja la montaña y al final encontraran una aldea hay un demonio en la casa de unas personas

Sin pensarlo tome al niño y corrí a máxima velocidad, sabía a donde me dirigía y por alguna razón tuve un mal presentimiento; cuando llegué al lugar, me adentre en el bosque manteniendo a Jack pegado a mí para evitar que le pase algo. Al llegar vi a Noemi con dos niños y había otro cazador, me acerque a ellos y note que la azabache tenía una venda en la boca y otra en los ojos; pero ¿que le hicieron? La mujer serpiente se lanzo para atacar a la pequeña de los tres, pero Noemi fue más rápida y la protegió recibiendo ella el daño.

Noemi: Agh - se quejó, el azabache corrió hasta ella al igual que yo

?? Y Kohaku: ¿Estas bien Noemi? - dijimos al mismo tiempo, el chico me miraba sorprendido por mi velocidad

Noemi: Estaré bien Iguro, me alegra volver a verte Kohaku

Esa mujer intento atacar nuevamente, pero en eso apareció ¿Haganezuka? Pero qué hace mi herrero aquí; el hombre se acercó a Noemi y le entregó una nichirindo, pero ella no hizo la prueba ¿cómo es que le están dando una espada?

Haganezuka: Desenvaina la - mencionó a lo que la oji ámbar hizo caso mostrando una espada de unos colores entre lila y celeste - Asombroso nunca había visto una katana de ese color, en ¿qué se basa tu respiración? - cuestionó

Noemi: Estaciones y elementos - respondió

El demonio fue decapitado por el pilar del fuego, así que decidimos ir a la sede con el chico enérgico; mientras caminábamos, Noemi se sentía mariada y en eso me llegó un olor a demonio; este era más fuerte que el de antes y se mostró frente a nosotros.

Narra Noemi

Paramos bruscamente ante la presencia del rey de los demonios, sabía que él era mas fuerte que nosotros pero debía proteger a mis hermanos; Rengoku-san se posicionó para pelear al igual que Kohaku, aquel demonio mando un ataque a mis hermanos y al chico que venia con Kohaku; pero reaccioné rápido usando mi primera postura

Noemi: Respiración elemental: escudo de viento - dije, los ataques del demonio eran reflejados como si de un espejo se tratase

??: Vaya tres cazadores de demonios acabaré con ustedes rápido

Rengoku: Aunque me cueste la vida no dejaré que los lastimes - mencionó, aunque estaba sorprendido de mi reacción

La batalla era dura y ambos estaban mal heridos, con miedo a que les pasara algo utilice otra de mis posturas; sin que aquel demonio me notara por mi velocidad.

Noemi: Respiración elemental 5ta forma: Tormenta escarlata - los presentes se sorprendieron ante tal velocidad, y todas mis estocadas dieron en puntos vitales de aquel hombre; el cual no sabia como reaccionar.

Uno de sus ataques me dio, pero el rey de los demonios se fue muy mal herido; sentía como mi cuerpo ardía por el veneno de los ataques de aquel hombre, sin embargo, aún mantenía la consciencia.

Rengoku: Sí, que es veloz señorita y veo que controla la respiración total - elogio a lo cual solo sonreí

Empecé a tener la necesidad de comer carne humana, pero no lo hacia, apesar de que mi pesadilla diera inicio nunca ataque a los que estaban presentes; al ver que mis uñas se volvieron garras, Rengoku y Kohaku se preocuparon pero el segundo vio algo que no creyó posible. Con mis propias manos rasgue mi cuello, escupiendo así una gran cantidad de coágulos de sangre de aquel hombre; mis hermanos se acercaron a mí con el botiquín y curaron la herida que de a poco iba cerrando.

Narra Iguro

No podíamos creer lo que le estaba ocurriendo a nuestra hermana, ella que es tan alegre y le pasa esto; vi como Rengoku se acercó con su Katana en mano para matarla, sin embargo, Ryuki y yo nos pusimos en medio sorprendiéndolo.

Rengoku: Alejen se de ella

Iguro: No lo haremos, no vamos a permitir que la mates - dije entre lágrimas

Rengoku: Ella ya no es su hermana, en cualquier momento podría atacarnos

Ryuki: Si quisiera dañarnos ya lo habría hecho

La discusión seguía y el tal Kohaku no sabía ni que hacer, el cuervo del castaño volvió con una carta; pues se había ido a pedirle a alguien ayuda. Pero por su cara parecía más bien que lo estaban regañando, lo escuchamos suspirar y vio que el pilar iba a usar una de sus técnicas; para ver si así nos quitábamos, sin embargo, se sorprendieron a ver que nuestra hermana nos protegió mostrándose molesta frente al cazador de alto rango.

Kohaku soltó su katana y se acercó a nosotros y al estar junto a ella la abrazó, acto ante el cual mi hermana se calmó un poco pero mantuvo su postura y tamaño para protegernos; justo en ese momento llego una señora de algunos 37 años y vio como Noemi nos abrazaba a los 4 protectoramente. Nuestra hermana veía a la mujer como analizándola, y luego paso su vista de la señora a Kohaku notando un ligero parecido entre ellos; liberándonos del abrazo protector volvió a su tamaño normal y se recostó en el pecho del ojiesmeralda hasta caer dormida.

Kohaku: Vaya se a dormido - dijo acariciándole el cabello

??: ¿Qué acaba de pasar Kohaku? - cuestionó al ver como su hijo cuidaba a mi hermana

Iguro: Deberíamos irnos de aquí, Ryuki también se durmió

Ante mis palabras el castaño acomodó a Noemi en sus brazos, y empezamos a caminar el pilar del fuego y la mujer nos seguían; llegamos a una cabaña y nos refugiamos ahí para pasar la noche. Mientras nos acomodábamos para dormir, escuche como el de orbes esmeralda le explicaba a su madre lo ocurrido; creo que el nombre de la mujer era Melany solo esperó que no le hagan daño a mi hermana.