Narra Kaneki
No puedo creer que la señorita Noemi nos permita ir con ella, aunque ahora que recuerdo, nuestra abuela nos contaba de los demonios y los cazadores de estos. Nos encontrábamos caminando por el bosque, pero me permitiré decir que al parecer estamos caminando sin rumbo; cuando salimos del bosque, el cuervo de Noemi apareció, me pareció raro, sin embargo, nos guió hasta por un sendero y a mitad del camino nos encontramos con un joven que iba acompañado de una niña.
??: ¡Mamá! — exclamó la pequeña de ojoz azules
Noemi: Hola princesa — dijo mientras la abrazaba y mirando al castaño frente a ella cuestiona — ¿Cómo les fue? Veo que estas herido Kohaku
Kohaku: Tranquila estoy bien, sólo son rasguños
Shizuka: Vaya, no sabíamos que tenias una hija
Kaneki: Shizuka, no seas imprudete y era de suponer que tenga familia si está casada — expresé al ver el anillo de ambos
Ante mi comentario, ambos se avergonzaron, la pequeña es muy linda a pesar de que no hayan mencionado su nombre aún; debo admitir que tiene un parecido a esos jóvenes pero me pregunto ¿de quién heredo los ojos?
??: Papi, ¿a donde iremos ahora? — preguntó curiosa
Kohaku: Iremos a la sede de los cazadores de demonios — ante su respuesta la menor estaba extrañada y nosotros igual.
Noemi: Nos tomará llegar a la sede unos días, Kaori no es de caminar mucho; apenas tiene 4 años y no estoy segura que Kaneki y su hermana caminen más de 400 kilometros para llegar antes del anochecer al próximo pueblo
Era cierto, no podemos seguirles el paso a ellos, sin embargo, creo que podríamos intentarlo para cortar una gran parte del camino; mientras pensaba note a Kaori observándonos como si viera a través de nuestras almas.
Kaori: Mamá, ¿ellos son nuevos viajeros? — cuestionó señalándonos
Noemi: Sí linda, ellos nos acompañaran de ahora en adelante
Kaneki: Soy Kaneki y ella es mi hermana Shizuka, somos los aprendices de la señorita Noemi
Kohaku: Vaya, ya tienes Tsugokus y no eres un pilar aún — comentó entre risas
Sin hablar más, emprendimos viaje a la sede de los cazadores de demonios, estuvimos caminando un buen rato, la brisa era fresca y Kaori era muy tierna; cuando llegamos a un bosque, vi que el joven Kohaku estaba alerta y nuestra ahora maestra también. Antes de poder preguntar algo, apareció un demonio, por lo visto se nos complicará la llegada al pueblo; pero notamos que ambos cazadores estaban sincronizados en sus ataques aunque estos usaran respiraciones distintas.
Noté que se dijeron algo, pero por la distancia no pude escuchar lo que habían dicho; sin embargo, me di cuenta que cambiaron sus posturas y usaron la respiración opuesta a la suyas, el castaño utilizó la 5ta postura elemental y la azabache la 7ma postura estelar; nunca creí que esto pudiera pasar, estaba sorprendido y no era el único Shizuka también estaba asombrada y Kaori estaba feliz porque sus padres mataron al demonio.
Narra Kohaku.
Después de haber matado al demonio, todos me agradecieron porque sus hijos habían vuelto a casa; tomé a Kaori de la mano y salimos de aquel pueblo, minutos más tarde, la azabache se mostraba cansada por lo que la cargue y en menos de 5 minutos cayó dormida. Estuve caminando por un largo trayecto hasta llegar a una división, habían pasado como tres horas por lo que ya había amanecido; Kaori se removió en mi espalda ya que los rayos del sol le pegaban en sus ojitos.
Kaori: Buenos días — mencionó entre bostezos
Kohaku: Buenos días princesa — dije mientras la bajaba de mi espalda
Caminamos hasta un río en el cual tomamos un poco de agua, también pesque algunos peces para comer; al terminar de comer, seguimos nuestro camino a la sede. Durante el transcurso de las horas, habíamos recorrido ya varios kilómetros hasta que nos encontramos a Noemi junto a dos jóvenes; Kaori al verla corrió hasta ella feliz llamando su atención.
Kaori: ¡Mamá!
Noemi: Hola princesa — saludó correspondiendo el abrazo de la menor y al verme dice — ¿Cómo les fue? Veo que estas herido Kohaku — se notaba preocupada
Kohaku: Tranquila estoy bien, solo son rasguños — dije para calmarla un poco
La joven que venía con ella se sorprendió por que tenemos una hija, lo que causó que el chico junto a ella le regañara al ser imprudente diciendo
??: Es obvio que tenga una hija si está casada — supongo que lo dijo por el anillo
¿Cómo le explicó que no estamos casados?, suspire resignado, pues por lo visto Noemi no le prestó atención al comentario; creó que soy el único que le da vueltas a ese asunto. No sé que más decían pues me encontraba en mis pensamientos o eso fue hasta que Kaori me saca de estos.
Kaori: Papi, ¿a dónde iremos ahora? — preguntó curiosa
Kohaku: Ahora nos dirigiremos a la sede pequeña — dije con una sonrisa
Noemi: Tardaremos una semana en llegar, Kaori no es de caminar mucho, aún es pequeña y no estoy segura de que Kaneki y su hermana logren recorrer más de 400 kilómetros.
Eso es cierto, los chicos no serian capases de seguirnos el paso para recorrer la mitad del camino antes del anochecer; mientras pensaba, Kaori preguntó si ambos jóvenes eran nuevos viajeros; a lo que la azabache asintió. Empezamos a caminar para no perder más tiempo, durante el camino, notamos que ambos hermanos se esforzaban para seguirnos el paso; eso era admirable, la pequeña de ojitos azules yacía dormían en la espalda de Noemi.
Después de 200 kilómetros, llegamos a las afueras del bosque, el ocaso se estaba presentando en el horizonte y con ello los demonios iniciarían con la matanza; Kaneki insistió de intentar llegar al pueblo, sin embargo, se notaba el cansancio en su cuerpo al igual que en el de su hermana.
Kohaku: No debes forzar tu cuerpo si no estas acostumbrado a caminar — aconsejé al ver a Noemi pensando en algo
Shizuka: Estaremos bien, aún podemos caminar
Noemi: Kohaku, si ellos quieren seguir continuemos, hay que acelerar el paso — dijo cargando a Kaori quien se durmió al instante.
Sin discutirle, seguimos caminando pero esta vez habíamos acelerado el paso; sabía que Kaneki y su hermana se estaban sobre esforzando para seguirnos el ritmo. Me sorprendí al ver que los chicos lograron llegar a la entrada del bosque, aunque les faltará el oxígeno; nos adentramos en aquel lugar y en eso sentí la presencia de un demonio me puse alerta.
No paso mucho para que el demonio apareciera, Noemi y yo estábamos atacando a esa criatura con todas nuestras fuerzas; sabía que estábamos sincronizados, pero eso sólo lo conseguimos al entrenar juntos; me encontraba cansado, pues no he dormido nada.
Kohaku: Esto es agotador, debemos pensar en algo — susurré
Noemi: Lo sé, además de ser peligroso. Creo que deberíamos combinar nuestras posturas más fuertes — comentó a lo que asintí y cambiamos el agarre de nuestras espadas, al igual que la postura que teníamos.
Logramos acabar con ese demonio con la técnica mas fuerte del otro. Cuando volteamos a ver a los chicos, estos estaban sorprendidos. Avanzamos un tramó más, hasta llegar al lago donde pasaríamos la noche. Insistí en hacer la primera guardia,sin embargo, Noemi me lo negó diciendo que ella la haría y cómo no quería discutir la deje hacerla pues debo admitir que estoy muy cansado.

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Las hermanas de Iguro
De TodoIguro y Noemi son gemelos, al ser el único hijo varón en un «clan» de puras mujeres; fue considerado un error, unos años después los gemelos tuvieron otra hermanita llamada Ryuki; que al igual que él tenía heterocromía