Capítulo 13

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Narra Alexandra

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Narra Alexandra

Despierto sola en el colchón donde todo ocurrió, doy un vistazo rápido a mi alrededor notando como ninguno de los chicos parece estar en la casa de campaña.

Me incorporo sintiendo un pequeño bulto a los pies de la cama, es un montón de ropa perfectamente doblada y con una nota encima, estiro mi cuerpo hacia delante logrando tomar aquel pedazo de papel con mis manos y regreso a mi sitio.

"Lamentamos no poder estar contigo al despertar, los chicos vieron ciertos movimientos sospechosos en el bosque e iremos a investigar, quisimos que durmieras más tiempo pues hemos notado que no lo has hecho últimamente. Jericho se encuentra en el huerto por si necesitas algo, te queremos." Es lo que puedo leer en la nota, le doy la vuelta a esta al observar en la textura del papel que había letras escritas por la parte de atrás, estas me dicen que Tadeus me ha traído ropa para que me cambie, que lindo gesto de su parte.

Me pongo de pie, tomo la ropa que me han dejado y una vez la tengo puesta me calzo. Salgo tranquilamente de la tienda en dirección a donde recuerdo es el huerto llevando mis manos hacia mi cabello para comenzar a desenredarlo y posterior a esto me lo recojo en una coleta.

Al llevar a la entrada del huerto me quedo de pie en esta mientras veo a Jericho de rodillas escarbar con sus manos la tierra.

—Hola... —susurro algo apenada por lo ocurrido. —¿Qué es lo que haces? —cuestiono retomando mi paso y acercándome a él.

—Estoy moviendo la tierra, eso le ayuda muchas veces a la cosecha a que las raíces reciban oxígeno además de que mezclo la tierra con la composta que los chicos me han ayudado a hacer.

—Oh, que genial... —el silencio comienza a invadir el ambiente al mismo tiempo en el que termino de decir aquellas palabras.

—¿Cómo estás? —pregunta Jericho interrumpiendo aquel silencio.

—Bien... Realmente la distracción sí me sirvió de algo...

—No estoy hablando de la distracción, te he preguntado cómo te encuentras, sé que tuviste una pesadilla y por mucho que me haya gustado lo ocurrido y las acciones de los chicos por verte mejor quiero saber la verdad —confiesa poniéndose de pie al mismo tiempo en el que toma una pala larga y camina en dirección a un lugar sin cosecha en el cual me da la espalda y comienza a hacer un pequeño hoyo con la pala.

—La extraño ¿sabes? A mi familia, realmente jamás creí que algo como esto fuera a ocurrir y mucho menos de este modo, creí que siempre iba a estar con ellos... Yo solo... extraño a toda mi familia, pero más a mi hermanita —Jericho deja de excavar para girar su cuerpo hacia mí y prestarme su completa atención. —Extraño ver como Camila se vestía con lo primero que encontraba en su closet, sus cantos desafinados por las mañanas y su linda y suave pijama antes de dormir, extraño verla todos los días sonreírme y verla haciendo sus extrañas imitaciones mías y de mi hermano... —un suspiro sale de mi boca acompañado por la lagrima recorriendo mi mejilla. —Jamás creí que alguien pudiera hacerme tanta falta como ella —un sollozo sale de mi boca. —Es solo que... yo la vi crecer, la vi durante todas las etapas de su corta vida, la cuide y la ame como a nadie y realmente no sé que hacer sin ella... Pero eso no es lo que más me duele, me duele haberla visto en sus últimos momentos, me duele no haberla podido proteger de la misma forma en la que se lo prometí cuando la vi por primera vez, yo le había prometido el mundo entero y jamás se lo pude dar... —suelto un suspiro dándome cuenta de todas las cosas que he retenido dentro de mi todo este tiempo. —Me duele que haya sido mi propio hermano quien la haya asesinado, más aún porque él era él, nuestro hermanito, nuestro cómplice...

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