El secuestrador más sexy del mundo

Bipolar

Cuando la señora Anne, la abuela de harry, me dijo que se iba a la cama yo me dirigí a una de las habitaciones de la planta de arriba, era grande. Entré en el baño de la habitacion y me quité la ropa que llevaba . Habrí el grifo, me metí en la bañera y poco a poco mis problemas se fueron esfumando.
Cuando terminé con el baño envolví mi cuerpo en una toalla blanca y volví a la habitación. Dejé caer la toalla al suelo y habrí las puertas de harmario, y vi que solo había ropa de hombre, me horrorizé al darme de cuenta de que estaba desnuda en el cuarto de Harry.
Se habrió la puerta y ahí estaba él, mirándome de arriba a abajo y acercándose lentamente a mí.
Nos quedamos a pocos centímetros de distancia mirandonos a los ojos, yo estaba paralizada y me puse roja como un tomate. El dió otro paso hacia mí y yo di un paso hacia atras, cuando reaccioné me agaché para coger la toalla que habia dejado caer pero cuando me levanté el me la quitó de las manos y la tiró encima de la cama. Me acarició la mejilla sin quitarme los ojos de encima.

-No, para. -Me alejé de él intentando convencerme a mí misma de que para él yo solo era una secuestrada, una más en su lista.

Cogí lo mas rápido que pude la primera camisa que encontré en el armario y corrí hacia el baño. Cuando me puse la camisa salí del baño y él seguía ahí inmobil mirandome.
-¿Que coño haces en esta habitación pedazo de pervertido? ¡Lárgate! -le grité.

-¿Como me has llamado? -Me gritó con esa voz ronca que él tiene. -Primero yo no soy ningún pervertido eres tú la que estába en mi habitación desnuda. Segundo no me pienso largar porque te repito que esta es mi habitación. Y tercero que sea la última vez que me levantas la voz. ¿Te ha quedado lo suficientemente claro? -me grito mirándome enfurecido al igual que yo a él.
Este tio es bipolar, primero me acaricia y luego me grita como loco.
-¿Y dónde esta mi habitación? -pregunté ya más calmada.
Me guió hasta mi habitación y se fué a la suya.