Septiembre 2, 1974.
Fue como un destello.
Te habían arrebatado de mi lado y casi no pude notarlo.
Una mañana, unos días después de la terrible noticia que habíamos leído. Yo estaba haciendo una ensalada para almorzar y tú leías un libro que te había obsequiado por nuestro aniversario. Te veías tan bonito con tu cabello despeinado, también traías mi camisa blanca. Sin duda aquella fue una fotografía muy bonita, pero también la última.
Antes de que pudiera dejar la cámara en la mesa nuevamente, oí que alguien toco tres veces la puerta.
Ambos nos miraron a los ojos pensando exactamente lo mismo, ¿lo recuerdas?. Pero deseé que solo sea el cartero viniendo a entrar un paquete.
Desgraciadamente no fue un cartero, fue la destrucción de nuestro amor quienes estaban detrás de esa puerta.
Creí que eran policías, pero eran unos malditos militares.
--- Hola, buenos días. Pertenecemos al ejercito surcoreano, señor --- los tres sujetos hicieron una reverencia hacia Heeseung, todavía en pijama.
--- Buenos días ---. Musitó él, confundido y Jungwon detrás intentando saber que estaba pasando.
--- ¿Puede decirnos cuántos hombres viven aquí? --- preguntó uno de los tres, el cual tenía una lista en sus manos.
--- D-Dos --- tartamudeó algo asustado.
--- Por favor, dígame sus nombres.
Heeseung dudó por uno segundo, pero no había tiempo para pensar.
--- Lee Heeseung y Yang Jungwon --- habló rápidamente.
Los tres sujetos pudieron ver a Jungwon detrás de Heeseung y no quisieron pensar lo obvio. --- ¿Cuál es su relación? --- preguntó uno firmemente.
--- Hermanos --- ambos respondieron a la vez.
Los sujetos se miraron los tres a los ojos sonriendo incrédulos. --- ¿Me estan diciendo que ambos son hermanos pero tienen distintos apellidos?
--- Sí, nuestra madre se casó con dos hombres distintos. Uno con apellido Lee y otro con Yan... --- Heeseung pudo ver de reojo a Jungwon, y las marcas en su cuello.
Allí supo que su historia había acabado.
Supe que querías llorar y juro que quise protegerte, mi hermoso cariño. Pero cuando menos lo espere te tomaron de los brazos, arrebatandote de mi lado.
Juro que quise sostenerte, juro que quise rescatarte, juro que oí tus gritos pidiéndome ayuda. Jungwonnie, sí te oí. Vi tus ojos llenos de lagrimas y la desesperación en ellos, vi que intentabas correr hacía a mí para aferrarte a mis brazos, y juro que quise ir por ti, cielo, lo juro.
Pero antes de que pudiera hacer algo me dispararon, y fue inevitable no moverme. Sentí como mi cuerpo se paralizó completamente y también vi como tus ojos se abrieron completamente cuando viste debajo de mi, un charco de sangre.
Vi tu sufrimiento intentando que esos malditos te soltaran, pero ellos eran muy fuertes y lograron introducirte en su vehículo.
Jungwonie, juro que quise ir por ti, lo juro. Pero todo se tornó negro y no volví a despertar.
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Nuestra historia en fotografías [Heewon]
Hayran KurguEn algún lugar del mundo, quien sabe donde, Hay una caja con fotografías dentro de ella. Fotografías que, si alguien se las encuentra, le serán totalmente comunes. Sin ningún tipo de rareza. A su vez, esas fotografías tomadas hace muchos años, cuent...