Cap 19 Segundas partes...

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Continuábamos con la misma tensión de antes. Por un lado estábamos nosotros: seis amigos hechos un asco, flacuchos por falta de comida y agua, sin estar entrenados y con una salud mental que iba en decadencia.

- ¿Qué está pasando? -exclamó Cassie desconfiada

- Pasa que ya habéis pasado los niveles, sois más listos de lo que pensaba, pero no lograreis salir -dijo el doctor con una sonrisa macabra

- ¿Quién dijo que no? -pregunté alzando una ceja y me abalancé a ellos para pelear

Sinceramente eso no lo había planeado. Pero sentía que debía hacerlo, y no tenía tiempo para pensar otra cosa.

Se hizo una lucha de película, literalmente, la mujer peleaba muy bien, y casi no podíamos más. A pesar de ser seis contra dos, nos estaban machacando.
Cuando casi todos iban contra la mujer, vi que se iba el doctor, supongo que estaba pensando que había ganado una lucha.

Pero esta vez no, así que fui a por él, con mi patada voladora le di en la espalda.

¡Wow! ¡Qué adrenalina!

Gracias gracias, había dado clases de Taekwondo hasta hace unos años.

- ¿No te lo esperabas a que no? -pregunté divertida y le pegué un puñetazo a la cara

- Veía venir algo así -dijo empujándome, con una sonrisa y se limpió la boca

Tras un fuerte combate, dejamos inconscientes al doctor y a la mujer. Se notaba que eran profesionales en lucha, y nosotros unos desnutridos, pero los superábamos en número.

Nos dirigimos a la puerta cuando el doctor tosió:

- Esta vez habéis ganado, pero... -empezó el doctor

- Oh cállate qué pesado -le espetó Cassie y nos reímos en burla

Entramos a la guarida del doctor. Cogí una cuerda de ahí dentro y atamos a los dos.

Cuando entramos a la guarida vimos un botón que decía out que estaba en inglés, de color rojo, traducido al español significa fuera, así que pensamos que si lo pulsábamos saldríamos de allí.

De hecho aún me pregunto como es que no lo vimos antes...

No os asustéis, sí que servía para salir. Cuando lo pulsamos, salimos corriendo y llegamos a la sala toda blanca de nuevo. Echamos al doctor y a la mujer a su guarida para que no saliesen y esperamos que la sala blanca nos devolviese a fuera.
Tardó, pero la sala empezó a moverse y en lugar de caer, subía hacia arriba.

- Allá vamos -exclamó Ryan, su frase estrella

- Allá vamos -repetimos el resto con una sonrisa relajada al fin

Entramos por una puerta a la tienda, con las paredes moradas y blancas, las estanterías, la ropa y las cosas que se vendían que la hacían parecer una tienda.

- Bueno chicos, lo conseguimos -dije yo suspirando y nos abrazamos

No me lo creía. Qué emoción. Llegué a pensar en algún momento que nunca saldríamos de ahí, pero lo hicimos.
Se me salía el corazón del pecho, pues lo habíamos conseguido.

Agarré a Ryan de la camisa y lo tiré hacia mis labios. Alcancé a ver que las otras dos parejitas hicieron lo mismo.

- Y ¡corten! -gritó el director y todos aplaudieron

- La mejor serie del mundo -dijo la actriz que hacía de Cassie

- Ya te digo, seguro que la veo mil veces -sonrió el actor que hacía de Ryan

Jaulas y misterios Donde viven las historias. Descúbrelo ahora