ANOTHER DAY| SP x Male| BAJO EDICION

Capítulo Veinticinco

—qué?- no podía decir un reto más cliché? Creo que he visto ese reto mil veces en libros. —Hay algún espejo? Supongo que eso sería lo más justo.-Trate de responder algo burlón, con suerte evitaba el reto— Aunque me encantaría que james me besara, no tenías un reto más original?-Hablo kenny mirando a Charlotte. —Ya, me gusta el drama, sabes?-Respondió ella. 
Analice un poco toda la habitación, tratando de buscar la persona con la que generaría menos drama. Por un lado, mis opciones principales eran; Craig, stan y kyle, leo no estaba. Craig quería recuperar a tweek, así que probablemente no era una buena idea, Estaba molesto con stan, así que no era una opción. Kyle tenía sentimientos hacia mí, por lo cual no quería ilusionarlo. 

Mire a token brevemente, parecía algo incómodo por la situación, pero era una buena opción. Me levanté suavemente para acercarme directamente hacia token. Al estar frente a él le alcance mi mano para que se levante y el acepto, su agarre era firme. Lo levanté y lo miré fijamente, él hizo lo mismo. Sus ojos marrones eran como chocolate, dulces. Me sonrió algo nervioso, coloque mi mano sobre su mejilla acercando su rostro al mío, podía sentir su respiración en mis labios, mi mirada solo se enfocaba en su boca. Al notar que él no iba a dar el paso, decidí hacerlo yo, empuje mis labios junto a los de él finalmente formando un beso corto. Me separe divertido por la situación, no fue tan grave. Mire a mí alrededor al sentarme, todos menos wendy parecían sorprendidos. —No esperaba eso.-Hablo clyde aún con los ojos abiertos. —Feliz cumpleaños?- bromeé para aliviar la situación. —Mi cumpleaños es pronto, sabes?- Siguió la broma kenny.  

El siguiente turno le fue a tweek, haciendo isla la pregunta. —Porque has terminado con Craig, te engaño otra vez?- Hablo ella. Él ambiente volvió a ser tenso. —Eso no se pregunta isla...-Agrego wendy. Craig parecía atento a la pregunta, como si no supiera la respuesta. En cambio, tweek no parecía nervioso como generalmente lo estaba, solo tomo un largo respiro y hablo. —No, no lo hizo. N-no hizo nada.-Sus nervios volvían a flote, me sentí algo mal por él. —No hace falta que respondas Tweek- Hable sonriente. Lamentablemente solo empeoró todo. —Cállate James, no necesito que me digas nada.- Tweek respondió de forma defensiva, todo el mundo en la sala se sorprendió ante esa respuesta. —Amigo, no tienes por qué responderle así.- Respondió Craig. —James no te ha hecho nada.- Le siguió Stan. —Oh c-cállate Craig. La única r-razón por la que termine contigo es por tu estúpida obsesión con James, dejándome a Mí, TU novio solo. Y tú, stan ¿Lo defiendes ahora, cuando estabas cuando él estaba en coma?-La respuesta tan agresiva de tweek fue sorpresiva para todos, nunca lo habían visto tan molesto. 

En silencio me levante de mi lugar y sin inmutarme deje la sala para salir al jardín delantero. Tenía demasiado para procesar, no sabía que estaba provocando tanto mal a tweek, mi amigo...
¿Podre ser normal alguna vez? No estoy pidiendo demasiado, solo quiero ser normal, quiero dejar de ser tan miserable con aquellos que quiero. 

No sabía qué pensar, el frío recorría mi nariz y la suave brisa recorría mi nariz, me daba paz. La puerta se abrió dejando ver a tweek. —Lo siento, j-james- Hablo este con su mirada caída. Quería hablar, pero mi vos no respondía. —Solo estaba... celoso.-Siguió.-No quería decir todo eso, y-yo entré en pánico, no tienes la culpa de eso...-Finalizo de hablar tweek. Lo miré, mi mirada era cansada, pero no intencionalmente. La puerta volvió a abrirse, pero esta vez, era Craig. Tweek simplemente volvió a entrar sin dirigirle la mirada a Craig. —Lo que dijo tweek...-mi voz salía extrañamente tranquila. En el fondo deseaba que fuera verdad, pero me engañaba a aceptarlo. Es extraño, cuando lo conocí simplemente nos odiábamos, pero ahora solo deseaba que me besara. —Sabes que...- Parecía que su mente se conectó a la mía por un momento, interrumpiendo mis palabras, Craig se adelantó juntando nuestros labios salvajemente, era como un deseo mutuo. El beso pasaba lentamente a ser más intenso, lentamente bajaba mis manos tomando control de su beso. Lo empujé contra la pared ansioso de deseo, lentamente mi mente dejaba de ser mía, dejaba de tener control de mi cuerpo. Me tire para atrás, los recueros inundaban mi mente, otra vez. No podía dejarme en paz, simplemente no podía, sentía que sus toques eran iguales y las nauseas subían a mi garganta. Simplemente mis ojos se inundaban de un mar, mar de recuerdos asquerosos, uno detrás del otro sin parar, toques, caricias, voces.