Cap. 28 "Bastardo".

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Era un miércoles por la mañana, eran las siete y media y me tenía que ir a trabajar, no recordaba muy bien lo que hice aquella noche, solo recuerdo estar tumbada en el sillón viendo titanic con una tarrina de chocolate entre mis manos con sabor salado por mis lagrimas, y una botella de tequila a mi lado, supongo que sería por la resaca. Me fui al cuarto de baño esperando un reflejo demacrado en el espejo, y así era, mis pelos eras considerablemente nefastos, enredados y enmarañados, tenía más ojeras que un mapache, y tenía todo el maquillaje corrido. Me lavé la cara, y me di un ducha fría sin pelo, tras esto intenté desenrredarlo pero nada de eso servía asique me hice un moño, que disimulaba mi despreocupación por la imagen. Me puse corrector, y un poco de rimel y sombra y para finalezar un colorete rosado, para que me diera más vitalidad al rostro. Me vestí con el uniforme, y salí de la habitación disparada. La limusina me esperaba con paciencia, cuyo chofer tocaba el claxón sin cesar.

-Hola Jacob- le digo a mi chofer personal.

-Buenos días señorita Stoessel- me dice con una sonrisa divertida.

Al llegar al edificio, fui antes al starbucks, donde pedí un café cargado. Fui bebiéndomelo, mientras caminaba dando pequeños saltitos hasta llegar a la oficina de Jorge. Antes de traspasar las puertas tuve que convencerme de mi actitud dentro, tendría que ser profesional, y simplemente ser neutra como un objeto que recoge recados. Mis pensamientos me llevaron a una sola idea.

-Tienes que ser un puto robot Martina- me digo en mis adentros, tras esto abrí las puertas, vi a Jorge con el periódico del día entre sus fuertes y rigurosas manos, le tapaba la cara, al bajar el periódico para poder verme, vi que no estaba del todo contento, era un expresión indescifrable que hizo que temblará.

-Buenos días- le digo con suma seriedad y sequedad.

-Me has traido un café con leche- me dice igual de seco.

-No sabía que querías un café- le digo dudosa, mientras absorvo mi propia taza, y camino hacia mi despacho.

-Pues ya lo sabes, antes de venir a trabajar quiero un café con leche en mi mesa, con poca azúcar- me dice mientras eleva otra vez el periódico para distanciarse.

-Perfecto- le digo en tono resignante. Cuando creo que puedo zafarme de su mirada, enseguida se pone en marcha para hablar.

-Enserio no me vas a decir nada?- me dice sorprendido y tirando el periódico a la basura.

-No se de que me hablas- digo haciéndome la tonta.

-Estoy siendo un capullo, y no me dices nada- me dice en tono de suplica a la vez que indignado.

-Lo que usted hagas con tu vida o deje de hacer no es asunto mio, tan solo soy su secretaria, y me ha dicho lo que debo hacer en el trabajo, no lo veo como una falta de respeto, asique si me disculpa- le digo en tono chulo y con sorna a la vez que intento no llevarme por el odio y ser seria.

-Nada más?- me dice burlón.

-No se preocupe, que si siento que me ha faltado al respeto, noo hará falta que me lo diga, seré la primera que me iré de aqui sin pensármelo dos veces- le digo amenazante, y cerrano las puertas detrás de mi para quedarme sola en mi despacho. Me sentí orgullosa de mi misma, una sonrisa se dibujó en mi cara, recordaba esa cara de pasmado al yo decirle esas palabras tan directas, me sentía una mujer de pies a cabeza, a partir de hoy me iba ha hacer respetar, no me iba a dejar manipular como una mrioneta como hasta ahora, Jorge lo había conseguido ya que era un primeriza y no lo quería perder, pero ahora ya se, que antes de el voy yo, pase lo que pase.

Me senté en mi escritorio aún con la sonrisa en la cara, y comencé a revisar el correro, lleno de mensajes quejándose, pidiendo un aumento, empresas que querían hacer tratos etc, yo me encargaba de ver si no era publicidad etc, y si era importante se lo mandaba a Jorge y si no lo era me ocupaba yo misma, tras esto comencé con llamadas en el buzón de voz, y llamé como a cien clientes.

Fui a almorzar, ya que había quedado con lodovica, una mujer que trabaja como recepcionista, y la conocí el primer día. Pasé por el despacho de Jorge y no recibí ninguna pregunta ni mirada ni nada en absoluto, tan solo un silencio que hinundo la sala. Tras el momento de tensión fui a el buffet, donde me tomé un bocadillo de jamón y queso con lodovica tan solo nos daban media hora de descanso y dicha media hora se me pasó muy rápido.

-Y qué tal te va con el Sr Blanco?- me dice dándome un codazo y en tono sexy.

-Hemos acabado, no se el que, pero hemos acabado con lo que teníamos- le digo intentando parecer convincente y; poco apenada.

-A que se debe?- me dice abriendo los ojos como platos.

-Tiene mujer- le digo resignada.

-Prometida y se llama Holly, y que?- me dice con normalida.

-Esta embarazada- las dos nos quedamos en silencio- Jorge es padre- le digo sofocada y metiendome un trozo de zanahoria del plato de lodovica en la boca.

-Imposible- me dice con la boca abierta- El señor Blanco le tenía odio, y más de una vez he ido a darle recados a Holly, y me la he encontrado con hombres... en pleno coito- me dice con una sonrisa maliciosa- me sobornaba para que no dijera nada- me dice entre dientes.

Sus palabras fueron tempanos de hielo para mi, me negaba rotundamente a volver a empezar una relación con Jorge, pero también me negaba a que la empezará una bruja como la que era Holly.

Me despedí apresurada de lodovia y fui corriendo al despacho, al llegar noté como mis mejillas estaban rojas por el calor de correr, y los nervios, Jorge me miraba con cara espectante, esperándo a que le soltará la bomba.

-Creeme que yo no he investigado, ha llegado a mis oidos, ahora puedes escucharme o no escucharme, yo simplemente te lo digo para quitarme el muerto de encima- le digo entrecortadamente.

-Martina escupe- me dice seco.

-Después haz tu lo que quieras no dependas de mi- le digo sofocada.

-Martina!- me dice más frustrado y impaciente.

-Holly se acostaba con hombres mientras estaba contigo, no tiene porque ser tuyo- le digo apresuradamente por la adrenalina. Su cara era un cuadro. Estaba pálido y a la vez notaba como estaba medianamente contento.

-Gracias- simplemente me dijo eso y tras esto salió del despacho pero no antes de venir hacia a mi. Se acercó con la inten'ción de abrazarme.

-No, Jorge, esto no significa nada, no tiene que ver con nosotros, ve ha hablar con Holly- le digo con tono pesado, y tras esto lo dejo con la expresión descuadrada, y me voy a seguir trabajando y a dar recados.

Bueno chicas espero que les haya gustado!!!

lose lose martina es una boba pero buenoooo :/
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