Cap. 29 "Resonando en mi Cabeza"

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Los gritos era incesantes, en la sala contigua se desarroyaba una pelea entre Jorge y Holly, y para mi supesar tenía que escucharlo todo, me tapé los oídos con tal de no oir los reproches de Holly a Jorge, también de como Holly se exasperaba y lloraba de rabia y le lanzaba objetos frágiles a Jorge para después confirmarme que se habían roto por el estruéndoso ruido. También oía diversos comentarios con respecto a mi, insultos y palabras terriblemente desagradables que hicieron que se me revolviera la barriga, no podía salir de allí, ni evitar escucharlos, porque para ello tendría que pasar por aquella habitación la cual era un infierno. Me pusé los cascos que llevaba en el bolso, y escuche heavy metal, no me gustaba mucho pero hizo que me evadiera de los problemas y me centrará en trabajar. Cuando supé que ya había calma, me quité los cascos, y me levanté para hablar con Jorge. Fui con pasos titubeantes, hacia su despacho. Abrí las puertas y no pudé evitar una expresión de sorpresa al ver tanto desastre.

-Hola, quieres que llamé al servicio de limpieza?- le digo dudosa.

-Si, porfavor- me dice tapándose la cara con las manos, y bufando de forma exasperante.

-Te traeré un café...- le digo con un hilo de voz casi imperceptible.

Salí de allí, y le dijé a la recepcionista que mandarán al despacho del Sr Guereña un asistente, y tras esto fui a la máquina de café, era muy cara y el café era horroroso, pero a estas horas el starbucks estaría lleno. Al coger el café fui arriba, con la epseranza de encontrar a Jorge más calmado y centrado. Así era, Jorge en caso de profesionalidad era una estrella, se tomaba sus dos minutos de vida personal y después volvía a el trabajo, con su gélidez extrema que hacía que se te pusieran los pelos de punta. No le dije nada tan solo le dejé el café al lado de su mano, y le di instrucciones al asistente de que se diera prisa, ya que Jorge necesitaba concentrarse.


Al terminar mi turno, a las siete, agarré mi bolso y mi abrigo, suspiré al terminar mi ultimo fichero, y tenía la cabeza realmente distorsionada, no veía las cosas claras, no sabía que decir no qué hacer con respecto a Jorge, era un situación bastante incomoda, qué se supone que se debe de decir a tu examante que acaba de cortar con su exprometida...

Por suerte Jorge me facilitó las cosas, y ya no estaba en el despacho, se abría ido minutos antes que yo y no se había molestado en decirmelo cosa que en realidad agradezco. Fui a la quinta avenida, allí había quedado con Andy, el chicom que me va a vender su ático. Fui allí con prisas ya que llegaba bastante tarde. Al llegar a mi destino, con la ayuda de un taxi, subí al piso seleccionado, el ultimo piso, y era un 64.

Llegué y llamé a la puerta, y al abrir me abrió la puerta un chico joven, de unos 27 años, pelo rubio, ojos verdes, una sonrisa dulce y con un diente torcido que para nada parecía un defecto sino que le daba una pinta más especial, tenía las fracciones duras, y su cuerpo era de escándalo, me esperaba a un viejecito que se iba a jubilar y querría gastarse su dinero en algún chalé cerca de la playa.

-Hola, siento haber llegado tarde, había atasco- le digo firme a pesar de soltarle una mentira.

-No te preocupes, me acabo de duchar, pasa- me dice con de forma dulce y pausada, le había pillado con la toalla enrrollada en la cadera, su torso estaba mojado e hico que mi mente se convirtiera en una mente sucia.-Quieres tomar algo?- me dice yendose hasta el frigorífico

-No gracias, estoy bien- le digo disimulada, y conteniéndome para que no me sonroje.

-Me cambio y vengo, mientras puedes mirar tu futuro piso- me dice de forma burlona. Le contesto con una simple sonrisa típica de adolsecencia, lo que me daría un aspecto de tonta. Al ver quee se había ido a lo que parecía ser su cuarto, decido levantarme y hacer loq ue me ha dicho, tiene una terraza enorme, y no tiene ningún piso delante, lo que hace que pueda ver a lo lejor el oscuro mar juntándose con el también oscuro y despejado cielo, se ve todo Nueva York con las pequeñas lucecitas de las casa, y la estatua de la libertad, hace que sonria solo de pensar la de parejas que se habrás propuesto matrimonio en aquel monumento. Noto como el chico ya está detrás de mi.

-Perdona, solo quería ver...- le digo al darme la vuelta y pillarme desprevenida.

-No te preocupes, quieres que te enseñe el resto?- me dice simpático.

-Claro- le digo de forma dulce. Veo como su mano pasa hasta mi mejilla, hasta que siento su contacto, esta se desvia hasta un mechón que se había descuidado y había caido, Andy me lo aparta suavemente, a lo que abro los ojos de par en par, confundida y con las mejillas echas un tomate.

-Perdona - me dice con una pequeña risilla.

-No, no te preocupes- digo titubeante. El me lleva hasta los pasillos, donde me enseña, un vestidor, dos habitaciones, y un aseo conjunto, todoe ra muy espacioso, pero se notaba que era un ático para estudiantes sin pareja y con un futuro planteado estrictamente para soltería y no realizar una familia lo que hizo que me deprimiera.

3 SEMANAS DESPUÉS:

Todo iba bien, ya tenía los tramites del piso, Andy ya se había mudado y yo ya estaba encargando el camión de mudanzas, Jorge y yo seguíamos exactamente igual de distantes, y por lo que había oido Holly había dimitido y había comenzado a trabajar en otra empresa, pero esta vez de moda. En mi caso, me había hecho un favor, ya no tenía que andar con tanta tensión ni temor, por ver a la mujer a la que técnicamente engañé, pero seguía estando Jorge y su fría mirada. En el tema del amor, Andy y yo salimos dos o tres veces al cine y a cenar, nada serio, y aún no habías dado el sigueinte paso, de todas formas tenía muy claro que no quería una relación seria, solo quería olvidarme de Jorge, y tener una vida plena y satisfactoria y para ello necesitaba a Andy y sus dotes de chico dulce y no sexy y peligroso como Jorge, digamso simplemente que Jorge era para mi la manzana prohibida, tentador, sexy, atrayente, epro como su propio nombre lo indica, prohibido. En cambio Andy era una fresa, era dulce y se podía abusar de el sin problemas, ya que no engorda y no te puede hacer ningún daño.

Hola chicas espero que les haya gustado este capitulo besazos comentar y votar.

LA SIRVIENTA "Novela Jortini♥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora