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Después de lo ocurrido en esa habitación ambos padre e hijo se fueron felicitando a mi padre por tener a un hijo "legítimo". Hablamos un rato explicando las reglas básicas de casa como por ejemplo.

No salir sin permiso diciendo a donde y a que hora regresar.

Ser protegido,seguido de guardias a todos lados. Para mi protección.
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La próxima semana. La boda que se me impuso fue la semana que viene y esto, después de saber todo lo que por derecho vivía, hasta quedarme por fin en un lugar al cuál llamar hogar desde que llegué aquí, no pareció hacerme sentir como un bicho raro. Solo estando aquí por tres días, los planes y la boda en conjunto fueron apresurados, no porque la gente estuviera ansiosa sino porque querían que esta alianza se sellara de una vez por todas.

No había elegido nada por "ordenes", todo/as los chicos o las chicas sueñan con su boda; el vestido, traje, el lugar, la música y lo más importante... la persona con la que se casan. Nada sobre esta boda había sido mi elección, pero estoy siguiendo órdenes.

Mi padre hizo que las sirvientas que trabajaban para él trajeran varios trajes a mi habitación y odiaba cada traje que me probé. No fueron terribles, pero verme con uno de novio lo hizo sentir más real y todavía no estaba listo para enfrentarlo.

-Necesito un momento- le dije a las mujeres y asintieron con la cabeza, dejándome con los distintos trajes mientras me paraba frente al espejo con uno puesto.

Suspiré suavemente, era hermoso. Pero no debería llevarlo puesto, las cosas no estaban destinadas a ser así. Se suponía que debía enamorarme y casarme con el hombre de mis sueños eso era imaginación, planearía la boda con mi madre y se suponía que las cosas serían perfectas.

Cerré los ojos con fuerza, sacudiendo la cabeza. No, me levanté de la cama y corrí por el pasillo, sabiendo exactamente dónde estaría. Siempre parecía retirarse en su oficina por negocios y tal vez esto era un asunto de negocios para él.

Llamé a la puerta con furia quería saber algo desde que estaba en esa casa, mansión, me volví diferente algo inusual al cuál no estaba consciente.

-Adelante-Escuché a mi padre decir detrás de esa inmensa puerta de madera.

Me paré en la puerta, sin saber qué hacer en ese momento con un último suspiro abrí aquella puerta echa de caoba echo de un material finó por así decirlo,entre mirando a mi padre que al parecer firmaba unos papeles.

- Que necesitas hijo- pregunto apartando la vista de sus papeles para mirarme con rostro sereno.

- Yo... Invitaste a mamá a la boda- respondí sentándome en aquella silla adornada con piel de algún animal.

- No- Su voz era de sinceridad se cruzó de brazos.

- Recuerda que es una boda katsuki tu madre estuvo contigo hasta los dieciocho años es mi turno de tenerte-

Mi padre río sacandome un leve seño fruncido realmente una parte de mí estaba aceptando la idea de que ella no estaría, sería un gran alivió, si lo estuviera, le diría, mejor dicho, gritaría. No todos los padres son reservados mi madre nunca me contó sobre quien era mi padre o que estaba vivo es raro pensar en querer desaparecer y olvidarse de todo.

- No sé por que mierda te dire esto pero...-

- ¿Mm?-

- G... gracias-

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✰ ✦͙͙͙*͙*❥⃝∗⁎.ʚ 𝓔𝓼𝓽𝓻𝓪𝓰𝓸𝓼 ɞ.⁎∗❥⃝**͙✦͙͙͙✩Donde viven las historias. Descúbrelo ahora