MewGulf
El muchacho que había comprado por simple aburrimiento había sido eso, un simple capricho. Sin embargo, lo que Mew Alessandro Suppasit, líder de la mafia más importante de toda Italia desconocía, es que tal joven se iba a convertir en la per...
Sabía que Tony Scarpacotta iba a conseguirle la tan codiciada y exclusiva invitación para las subastas clandestinas de la organización "Vita eterna"; y el viernes por la mañana, su tan eficiente asistente le tendía dicha invitación en una bandeja plateada mientras degustaba tranquilamente su desayuno.
- Prepara todo – Mew le ordenó a Geronimo – la subasta empieza a las once de la noche, saldremos de aquí a las siete de la tarde – cerró la invitación, la colocó en la mesa y volvió a tomar el tenedor para terminar la fruta que seguía en su plato.
- Si señor – Geronimo abandonó el comedor para organizar el viaje que su jefe haría ese mismo día por la tarde.
***
Un lujoso bentley mulliner mulsanne color negro llevaba en sus asientos traseros a Mew Alessandro Suppasit. El líder mafioso tenía en sus manos una tableta electrónica desde donde monitoreaba el viaje de tres horas y media de su natal Regigo Calabria hasta la ciudad siciliana de Ragusa.
Ragusa se encuentra al sureste de la isla y tiene alrededor de setenta mil habitantes que se dedican principalmente a la agricultura, trabajos en las granjas, manufacturas ligeras, pequeños campos de petróleo y, obviamente drogas, aunque en éste último negocio eran pocos los ciudadanos que estaban involucrados.
La ciudad se encuentra sobre una colina caliza y entre dos hondos valles, Cava San Leonardo y Cava Santa Domenica. Sus orígenes se pueden remontar al segundo milenio antes de Cristo y en la actualidad forma parte del Patrimonio de la humanidad como una de las ciudades más hermosas del barroco tardío.
En el vehículo blindado viajaban Mew, Fabrizzio su chófer y Geronimo, no obstante, eran escoltados por dos vehículos repletos de hombres leales a la familia Suppasit y que lucharían por mantener la integridad física y la vida de su líder. Nadie le tocaba un solo cabello a Mew Alessandro Suppasit y la muerte era el único castigo de aquel que tuviera la fatalidad de conseguirlo.
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FABRIZZIO
Durante todo el trayecto Mew no dijo una sola palabra. Pero él era así, un hombre de poca conversación y todavía menos amigos. El líder de la N'drangheta y cabecilla de la familia Suppasit era un hombre extremadamente meticuloso, detallista y controlador. En su trato con la gente, generalmente era directo e incisivo, usando siempre la correcta cantidad de palabras, porque Mew podría hablar poco, pero aun así es capaz de dejar en claro lo que quería decir sin dar pie a que se interprete alguna otra cosa.
Piensa en grande y quiere que su autoridad sea aceptada sin duda alguna. Mew es seco, sarcástico y sumamente rencoroso. Puede ser excesivamente crítico y riguroso cuando las cosas o las personas no cumplen con sus estándares. Es capaz de pasar por encima de cualquiera con el fin de lograr su objetivo y aunque más de un centenar de hombres trabajaban para él, suele ser tempestuoso y autosuficiente.
