ONE SHOTS CACHÉ | SEGUNDO LIBRO

1. [Car's Outside]

I'm packin' my bags that I didn't unpack the last time

María José.

Después de salir de la casa de Daniela me quedé sentada en la entrada de mi departamento, pensando en todo, en nosotras, en nada, pero más en nosotras, no quería que nuestra historia terminara aquí y así, no quería dejarla, no quería que temiera a nada, quería que estuviera conmigo, YO quería que estuviéramos juntas, no importa el lugar que sea, pero juntas.

De mis ojos salieron lágrimas que me contuve todo el rato en la casa de ella.

Ahora estoy aquí, terminando de empacar, ni nueva vida comenzaba mañana y daría todo por que comenzara junto a ella.

Pero no iba a ser así.

Solo espero que el destino no sea tan maldito y me haga reencontrarme con ella en un futuro y si ya no se puede en esta vida, que sea en la otra si es que existe.

Porque la quiero conmigo.

I'm sayin', "See you again, " so many times, it's becoming my tagline

No podía concentrarme en nada y eso que no estaba haciendo nada, dejé de empacar cuando vi que lo estaba haciendo mal, mi mente estaba perdida y perdida en los recuerdos de la primera vez que me separé de ella.

Flashback

- No te vayas chiqui...- sus ojitos estaban rojitos, no era su alergia esta vez, ahora era por el llanto.

- No quiero hacerlo...- la miré.

- Entonces no lo hagas, quédate conmigo...- se abrazo a mi.

- Chiqui solo serán unos días, en cuanto mi tía se sienta mejor regresaré, te lo prometo.- le dije.

Ambas teníamos 12 años, nos conocimos a los 7 en el jardín de niños y desde ese momento habíamos sido inseparables.

No conocíamos que era estar lejos de la otra por horas, esta vez no la vería en días y no sabía si podría soportar tanto.

- Te creo, solo no te olvides de mi, Ok?.

- Nunca, escúchame, nunca podré olvidarme de ti.- Dejé un beso en su mejilla y limpié una lágrima que bajaba.

Fin del Flashback.

Esa fue la primera que nos separamos y aunque fueron unos días, la pasamos terrible, la distancia era uno de los factores que nos jugaban en contra, el verla a través de una pantalla no le hacia comparación a tenerla en frente y acariciarle la carita o el cabello.

A los 18 ella se fue, quería estudiar en una gran universidad en el extranjero, aunque sabía que me dolería tenerla lejos nuevamente lo acepté, quería verla feliz.

Le prometí nuevamente que nos volveríamos a ver.

Era mi mejor amiga y lo que más quería era que cumpliera cada uno de sus sueños, aunque yo no estuviera en ellos, verla triunfar seria un logro más para mi.

Nos mantuvimos comunicadas los primeros meses, la universidad es pesada y más si ese lugar es nuevo para ti, lo poco que sabia de ella era por las redes sociales, que casi nunca usaba, otras veces iba a su casa y le preguntaba a sus padres por ella, conversaba con juli, me llenaba tanto el corazón oír que lo estaba logrando.

Yo era la más feliz por ella.

Yo no me quedé atrás tampoco, una vez le prometí algo y no descansé hasta cumplirlo, ahora tengo mi propia galería donde expongo cada cuadro que pinto.
Tengo 25 años, y a estás alturas de mi vida puedo decir que si trabajas muy duro para conseguir lo que te propones, lo logras.