6- Aemond Targaryen

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POV: Aemond. 126 d.C

Desde una ventana podía ver como amos estaban sacrificando niños. Me distraje cuando senti a alguien a lado mio, mire pero no había nadie. Decidí largarme de allí e ir ver si podía encontrar una posada donde quedarme.

Por suerte para mi si encontre un lugar, le pague de adelantado a la mujer y me largue hacia la habitación. Cuando subia la escaleras sentía que alguien me estaba siguiendo hasta que en el pasillo antes de llegar a la habitación sentí unos pasos que a pasar que fueran inpercibidos los note, tome la daga que escondía y rápidamente tome a la persona que me seguía la puse contra la pared y mi daga en su garganta.

Quede estuperfacto, era una mujer mas baja que yo, tenia el pelo blanco-plateado, ojos violetas, la nariz respingada, unos labios carnosos muy deseosos y un cuerpo de infarto. Era bellísima, había visto a muchas mujeres hermosas pero ninguna se comparaba con ella.

Ella también me detallaba y en un momento ambos nos quedamos mirando fijamente a los ojos sin poder apartar la mirada del otro.

- ¿Quien eres y porque me sigues?- dije como pude.

- Quería preguntarle si podía aceptarme en su habitación, no cuento con dinero y necesito un lugar para descansar estoy demasiado exhausta.

- El vestido que tienes puesto es el más fino que he visto en mi vida, ni siquiera podría decir de que esta hecho pero esta claro que debe costar una fortuna

- Pero justo en este momento no tengo y no podría pagar con mi vestido me quedaría sin ropa- seguía hablando sin importarle tener una daga en la garganta

- ¿Cómo podría yo dejar a alguien entrar en mi habitación sin saber su nombre?

- Me llamo Anastasia, ¿Me dejaría quedarme en su habitación? Será solo hasta recuperarme.

Estaría dejando a una extraña entrar mi habitación pero no podía decirle que no, ella me generaba mucha curiosidad y si se veía agotada. Me di la vuelta y abrí la puerta de donde me hospedería.

- Adelante- le dije amablemente

- Muchas gracias- dijo mientras pasaba

El lugar era pequeño tenía una cama para dos personas, 2 asientos, un armario y una puerta que supuse iba para el baño. Lo justo y necesario para quedarme unos días por aquí. En el armario deje mi capa y bolso.

- ¿Porque una joven dama estaría en este aprieto de no tener lugar para quedarse? ¿Quien eres?- había algo en ella que no me cuadraba.

- Quería recorrer la ciudad y mi casa queda muy lejos de aquí y a su segunda pregunta ya la había respondido, soy Anastasia- hablaba de una manera que me dejo hechizado.

- Que casualidad, más casualidad aún que me halla pedido alojo una mujer que tiene rasgos Valyrios justo como los míos.

- Las casualidades son increíblemente comunes- respondió como si nada.

- Aveces demasiado.

- ¿Quien eres? Debes ser un Targayen- ahora ella pregunto

- Cómo también podría ser un Velaryon o un Celtigar.

- Lo dudo, notó fuego en ti- sentí algo raro cuando dijo eso, ella me consideraba un Targaryen.

- Si, soy un Targayen, hijo del rey.

- Un príncipe- afirmó

- ¿Y quienes son tus padres?- le pregunte

- Prefiero no responder, pero dime, que hace un príncipe de Poniente en Qohor espiando a los magos- eso me intrigó aún más

"Casa de los dioses"[aemond]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora