Sonó el despertador. Eran las nueve de la mañana.
No tenía ningún motivo para madrugar, pero por primera vez me apetecía hacerlo.Permanecí un rato más en cama, echándole un vistazo a todas las notificaciones de mis redes sociales y respondiendo a los whatsapp de mis amigos. Luego, decidí levantarme y me dirigí al baño. No aguantaba más, era una de las desventajas de no usar pañal como cuando era pequeña. Al terminar, me lavé las manos y me peiné un poco, ya que parecía una loca recién salida de un manicomio. Realmente daba miedo.
Salí de mi habitación. La casa estaba muy tranquila, aparentaba que todos seguían durmiendo. Lo raro era que yo estuviese despierta un sábado a esas horas. Me dirigía a la cocina a desayunar algo, intentando entender como tenía tanta hambre últimamente, empezaba a preocuparme.
Al entrar a la cocina ví a Marc preparándose su desayuno. ¿Qué hacía el despierto? Al parecer, últimamente, yo no era la única loca.
-Buenos días Marc. ¿Y tú despierto a estas horas?- pregunté sorprendida.
-Buenos días enana, quedé con mis amigos para ir echar un partido de fútbol dentro de un rato. ¿Y tú?
-La verdad es que no lo sé, me apetecía madrugar hoy.
-Cada día me sorprendes más -dijo Marc riéndose.
Posiblemente estuviese yo más sorprendida que él, no era un comportamiento normal en mí, normalmente era una marmota y para sacarme de cama hacía falta llamar a los bomberos, y si estaban buenorros, mucho mejor.
Comencé a preparar mi desayuno, mientras que Marc empezaba a desayunar. Eché un poco de leche en una taza, y la metí en el microondas. Mientras esperaba, me senté y me quedé embobada mirando como desayunaba mi hermano. Quizás aún estaba algo dormida, quizás..
-May, aún tenemos una conversación pendiente..
-¿Cuál? -pregunté, aún sabiendo la respuesta.
-¿Quién era el chico del centro comercial?
-Se llama Jess, lo conocí ayer a la mañana en el cementerio. Al parecer nos conocemos de antes pero no consigo recordar de qué. Yo creo que se está equivocando de persona..
-Alejate de él. No preguntes porque, pero tengo un mal presentimiento con ese chico..
La expresión de Marc había cambiado. Realmente parecía estar preocupado con el tema de Jess. Empezaba a preguntarme si él sabría más de lo que me estaba contando..
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No todo es dolor.
RomanceMay se había tenido que enfrentar al momento más duro de su vida, el perder a un ser querido. Un día, el destino quiso que conociera en el peor de los lugares a Jess Harper, un idiota y atractivo chico, que cambiaría completamente todo su mundo.