.｡..｡.♡✿ 𝓓𝓪𝔂 𝓐𝓷𝓭 𝓝𝓲𝓰𝓱𝓽 ✿♡.｡..｡. ~ Madara Uchiha y tú

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Cuando terminaron las clases salí de la preparatoria dirigiéndome hasta un parque cercano con mi mejor amiga que muy amable me invitó un helado, aunque más que invitación era como una deuda que debía de pagar por haberle echo su tarea cuando el profesor salió del salón por ir al baño, me estaba pagando con helado, pues le dije que si no me daba dinero u otra cosa no le haría nada, y aquí vamos al parque por mi helado que para que se le quite serán tres, uno para aquí, otro para el camino y el otro para la casa

—¿Qué haz echo con ese tal Madara?, ¿Ya le dijiste quien eres?

—Sí, ya se lo dije hoy

—¡¿Enserio?!, No hubieras hecho eso

—¿Por qué no?

—Para que siguiera contándote sus divertidas anécdotas, a mí me gustaban mucho

—Sí a mi también, pero me sentía algo incómoda que me mandará mensajes pensando que era esa tal Lily, decidí mejor decirle la verdad

—Bueno, al menos fue divertido mientras duró —hizo puchero —Pásame su número, se ve que está guapo —mordió su labio

—¡Obvio no!, Ha de tener unos 25 años, es mayor que nosotras

—¿Y eso qué?, 5 años no le hacen daño a nadie —se encogió de hombros

—Aún así no lo haré

Karina sólo me saco la lengua cruzandose de brazos a lo que yo sólo sonreí un poco entrando a la heladería por mi helado, Karina me siguió para pagar los helados que quedó impresionada al ver que había pedido tres, más no dijo nada y sólo los pago para salir de ahí y dirigirnos a mi casa para hacer la tarea que nos habían encargado, ella iba contándome lo emocionada que estaba porque al fin el chico popular se había fijado en ella y que la había invitado a salir, me perdí en cuanto dijo “Paul me invitó a salir” pues él no me agradaba mucho que digamos

En cuanto llegamos a mi casa Karina se dirigió a la sala y como si fuera su casa encendió la televisión colocando una película, me miró de arriba para abajo y me ordenó ir a la cocina por algunas papas fritas como si ella fuera la dueña de la casa, no me molesto que lo hiciera ya que me causo gracia y siempre lo hacíamos cuando íbamos a la casa de la otra por lo que para nosotros no era extraño hacerlo, incluso jugamos a qué la otra es dueña de la casa y que la otra es la sirvienta de la otra que debía de cumplir todo lo que la otra pedía, ahora me toca ser a mí la sirvienta de Karina

Por lo que rápido que fui a la cocina por lo que me había pedido y antes de que pudiera meter lo necesario en un plato hondo mi celular comenzó a sonar, miré quien me había mandado el mensaje que sin saber la razón me hizo sonreír como estúpida, y yo pensando que ya no me iba a hablar de nuevo pero me equivoqué, al parecer le caí muy bien como para que me este mandando mensajes como si fuéramos realmente amigos, y no sé porque pero Madara me cae bien, no es como los otros chicos que nada más está diciendo estupideces, él me hace reír tanto por sus anécdotas, como por la manera de hablar porque me ha mandado audios

Y debo admitir que tiene una voz encantadora, se escucha que es mayor que yo pero aún así no quita el echo de que su voz es hermosa, de que su voz me encanta que no me cansaría de estar escuchándolo, ¿Qué si me gusta?, No sabría decirlo porque no lo he visto en persona, sólo he escuchado su voz y puedo decir que es mayor que yo, y si lo es no me importaría ser su amiga, como dijo Karina, es guapo y no pierno nada con tener a alguien como Madara cómo amigo, total, no creo que algún día logremos conocernos, además de que estamos muy lejos del otro como para quedar un día y conocernos, eso está más que claro que jamás pasará lamentablemente.