Capítulo 6

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9 y 10 años

Una de las actividades que ambos descubrieron que disfrutaban realizar juntos era la lectura. Raven había leído algunos libros en su natal Azarath, por lo que saber que en la base de la liga tenían una enorme biblioteca repleta de todo tipo de libros fue más que emocionante para ella.

Damian y Raven tomaban algun libro de su interés y pasaban horas concentrados en su lectura. Uno al lado del otro, sumergidos en la fantasía, la historia, la medicina, el suspenso e incluso se sorprendió de encontrar libros sobre magia, conjuros y rituales. El linaje Al Ghul también había estado ligado con lo sobrenatural desde hace siglos.

Esa tarde, Damian debía terminar con sus deberes escolares. Sin interrumpir, Raven decidió hacerle compañía leyendo a unos metros de él. El conocimiento que tenía Damian era muy superior al de cualquier niño humano de su edad. Las habilidades de él se habían ido desarrollando desde temprana edad por su familia e instructores. Por su parte, todo lo que sabía Raven era por los pocos años que tuvo de estudio por parte de los monjes en Azarath, lo demás lo aprendía de forma autodidacta. Ella amaba aprender, pero su padre no perdería el tiempo en su educación. Y era algo que la amatista envidiaba de la vida de su amigo.

"He terminado", su suave voz rompió el silencio del lugar, acompañado del sonido que se generaba mientras guardaba sus materiales de estudio.

"¿Tienes algo en mente?", preguntó sin quitar el libro de su rostro. Solo su mirada era la que había viajado hacia él.

"No realmente. Quisiera descansar unos minutos", respondió mientras colocaba sus brazos detrás del respaldo e inclinaba ligeramente la silla hacia atrás al estirar su cuerpo.

"De acuerdo", dijo volviendo a su lectura. Más no era la respuesta que buscaba.

Ella quería conversar. Y había algo que desde hace semanas estaba en su mente.

"¿Qué fue de tu hermano?", soltó sin más.

"¿Qué?"

"La vez pasada lo mencionaste. Parecía ser alguien importante para ti."

"Mi hermano mayor huyó de aquí."

"Mi padre me dijo que solo había un descendiente de tu madre."

"Jason no era mi hermano de sangre. Él era…él era el que me protegía cuando me metía en problemas."

"Y…¿Por qué huyó?"

"Recobró la memoria que le había sido quitada al revivir por el Pozo de Lázaro. Recordó el lugar donde pertenece. Y que tomaría venganza por lo que le había sucedido antes de morir. Por ello, no pudo llevarme en ese momento. Antes de irse, prometió que vendría por mí."

"¿Lo extrañas?"

"Sí."

"¿Aún lo esperas?"

"No."

Sería mentirse si respondiera que sí. Pero sabía que era casi imposible que pudiera volver. Y en el fondo, deseaba que no lo hiciera. No lograría nada.

El no podía huir de su destino. Este ya estaba escrito desde antes de que naceriera. Y su deber era heredar y dirigir la Liga de Asesinos en un futuro, tal como lo hacía su abuelo, incluso mejor. No defraudaría a su familia.

O eso se repetía a diario.

Curar, desvanecer y, por último, sanarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora